Nos hacen ver que una de las lecciones más duras que ha recibido el presidente Andrés Manuel López Obrador vino de las fuerzas armadas.
De una manera muy didáctica los militares le demostraron al mandatario que generalizar en las acusaciones de corrupción puede resultar muy costoso.
Nos señalan que quedará para la historia la manera en la que reaccionó el Presidente al conocer el arresto del general Salvador Cienfuegos en Estados Unidos acusado de narcotráfico y lavado de dinero . De inmediato, amenazó con realizar una limpia en la Secretaría de la Defensa de todos los militares con algún vínculo con el exsecretario Cienfuegos .
“ No vamos nosotros a encubrir a nadie , ya pasó ese tiempo (…) Vamos a esperar el resultado de la investigación , pero el solo señalamiento de funcionarios, aún sin concluir el proceso, ya va a implicar el retiro de esos cargos...”
Ahora el general Cienfuegos está por regresar a México y no hubo ningún mando del Ejército removido por su cercanía con el exsecretario.
Generalizar no es bueno ¿Se habrá aprendido la lección?
grg
