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juan.arvizu@eluniversal.com.mx
La austeridad de Morena en el Congreso de la Unión quebró la tradición de que la bancada en el poder realice reuniones plenarias en algún estado (a las que viajaban senadores, colaboradores e invitados del gabinete presidencial), para realizar pasarelas políticas con cargo al presupuesto senatorial.
Hayan sido de priístas o panistas, en los tres sexenios pasados las bancadas con mayoría hacían medir su fuerza en proporción a los costos de hospedajes, boletos de avión, banquetes, servicios de convención y días de paseo, también se agregaban las atenciones del gobernador que los recibía.
Esta vez, con el estandarte de la austeridad, la fracción de Morena, con 59 integrantes, más sus once aliados del Partido del Trabajo (PT) y de Encuentro Social (PES), acordarán su agenda legislativa en la sede de Paseo de la Reforma, en sólo una jornada, el próximo martes 6 de febrero.
“Aquí vamos a desayunar, comer y cenar, con los propios medios que hay, pero no habrá necesidad de asistir con tupper. Vamos a hacer una reunión de trabajo pesada y muy austera”, aseveró el presidente de la Junta de Coordinación Política en el Senado, Ricardo Monreal Ávila.
Los panistas, al viejo estilo, viajarán a Ciudad Victoria, Tamaulipas, donde estarán tres días con sus 24 legisladores, que serán el público de tres ponentes de temas políticos y económicos.
Con sólo 15 integrantes, la bancada del PRI tiene cita el domingo 27 y lunes 28 en la ciudad de Querétaro donde, encabezados por Miguel Ángel Osorio Chong, se verán ajenos al gabinete presidencial, cuya participación lleva reflectores a estos eventos.
Las agendas que deben registrar los grupos parlamentarios al inicio de un periodo ordinario, se formalizan en tales encuentros, los cuales son guía en el inicio de los trabajos legislativos.
Cuando se generó una ola de reprobaciones públicas a los gastos de las cámaras legislativas y tras aflorar escándalos por filtraciones de “fuego amigo” entre panistas (en este caso, diputados), que de noche se divertían con bailarinas locales, y de día decían discursos de su servicio público en sus plenarias, las bancadas prefirieron quedarse en la Ciudad de México a cumplir esa tarea.
Pese a la proximidad de las elecciones y esquemas de disciplina financiera con ajustes al presupuesto de la Federación, hubo fracciones que prefirieron reunirse en hoteles de Reforma y Polanco, ajenos a los gastos cortos que ni la izquierda anhelaba reducir. El PT en los seis años pasados ninguna reunión plenaria realizó.
Esta vez, la bancada del PRD, con cinco miembros, tiene programado reunirse el lunes 28. El PES, que suma cinco senadoras, tendría su reunión por separado el miércoles 30.
Presentarán a titulares. Sin embargo, PES y PT acudirán a la plenaria de Morena que dará escaparate a la presentación de los secretarios de Gobernación (Segob), Olga Sánchez Cordero; de Hacienda (SHCP), Carlos Urzúa Macías; de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard.
También se define la posible asistencia de la secretaria de Bienestar, María Luisa Albores González; de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, así como el fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero.
La interlocución de los senadores con miembros del gabinete de su partido en el poder, a través de los años permitió que, a puerta cerrada, trataran los aspectos de reformas y proyectos de ley fundamentales para el proyecto de gobierno.
