La idea de tener un líder autócrata, que tome decisiones sin interferencia del Congreso es cada vez más atractiva en México, según una nueva encuesta del Pew Research Center.
La encuesta, aplicada en 24 países, revela que si bien la democracia sigue siendo el sistema de gobierno preferido por la mayoría a nivel global, ha caído significativamente el entusiasmo por ella en los últimos años.
México es, a partir de los resultados de la encuesta, el país donde más ha crecido el apoyo a la autocracia: el porcentaje que considera que un sistema en el que “un líder fuerte pueda tomar decisiones sin interferencia del Parlamento o las cortes sería una buena forma de gobernar a la nación” pasó de 27% en 2017 a 50% en 2023, un aumento de 23 puntos porcentuales.
Después de México, Kenia es el país donde más creció el apoyo a la autocracia (pasó de 39% a 52%).
A nivel global, indica la encuesta del Pew, titulada La democracia representativa sigue siendo un ideal popular, pero en todo el mundo se critica su funcionamiento, en promedio 59% se declara insatisfecho con la forma en que funciona la democracia en sus naciones.
En México, a la par de este aumento de apoyo, decreció el porcentaje que considera un sistema autocrático como una “mala forma de gobernar al país”, al pasar de 67% a 48%. El porcentaje de ciudadanos que apoya una autocracia o un régimen militar suele ser mayor en los países de renta media que en los de renta alta. A la pregunta de si considera que “un líder fuerte o el Ejército sería una buena forma de gobernar al país”, 71% de mexicanos respondió que sí.
La encuesta incluyó cinco tipos de gobierno: democracia representativa, democracia directa, tecnocracia, autocracia y régimen militar; 77% opina a nivel global que la democracia representativa es la mejor forma de gobierno; 83% considera que el peor régimen de todos es el militar.
En el caso de México, 44% dice que un régimen militar es “algo bueno”; 14% piensa que es “muy bueno”; 21% considera que es “algo malo” y 19% que es “muy malo”.
En términos globales, las personas con menor educación, menores ingresos y ubicadas a la derecha del espectro político tienen más probabilidades de favorecer un régimen militar, indica el reporte.
Una de las razones de la insatisfacción de la gente con la democracia se relaciona con la percepción de que a los funcionarios democráticamente electos no les importa lo que piensan los ciudadanos y están desconectados de lo que ocurre en sus naciones, señala el Pew.
Un 74% considera que a los funcionarios electos no les importa lo que los ciudadanos piensen. En México la cifra es de 78% contra 20% que piensa que sí les importa.
La encuesta también abordó el tema de qué o quién haría que las democracias funcionen mejor; 50% cree que la situación mejoraría con una mujer a cargo, y 46% que una persona que creció con escasos recursos lo haría mejor. En países como México, Brasil, Argentina, Indonesia, Kenia, Nigeria y Sudáfrica la idea de tener funcionarios electos religiosos resultó particularmente atractiva.
La encuesta se da a conocer a poco más de tres meses de las elecciones presidenciales mexicanas, en las que, según se prevé, será una mujer la ganadora, convirtiéndose en la primera presidenta en la historia del país.
Un promedio de 54% en las 24 naciones encuestadas afirma que hay al menos un partido que representa bien sus opiniones, pero 42% dice que no hay ninguno que las represente. En México, quienes dicen sentirse más representados al menos por un partido son aquellos que están a la derecha del espectro político (50%); entre quienes están a la izquierda, 42% piensa lo mismo. Entre los factores involucrados para que la gente apoye la autocracia hoy más que en 2017 destaca:
Ingresos: En 11 países las personas con menos ingresos aceptan con mayor facilidad la idea de un líder fuerte cuyo poder no esté bajo supervisión.
Educación: En 15 naciones las personas con menos educación tienen más probabilidades de considerar que un sistema autocrático es una buena forma de gobierno.
Ideología: Quienes están a la derecha del espectro político tienen menos probabilidades de decir que un líder fuerte es una “muy mala” forma de gobierno.
En particular, indica el informe, la gente con una visión favorable de los partidos populistas de derecha en Europa es la que menos caracteriza a la autocracia como una muy mala forma de gobierno.