La Sala Especializada del Tribunal Electoral determinó que el presidente Andrés Manuel López Obrador infringió la ley electoral al posicionarse sobre el proceso electoral de los estados de México y de Coahuila, donde también hizo un uso indebido de programas sociales.
Por unanimidad, se resolvió que las expresiones del Presidente en sus conferencias matutinas del 24 de mayo y 2 de junio constituyeron violación a los principios de imparcialidad y neutralidad, uso indebido de programas sociales, incumplimiento de medidas cautelares y uso indebido de recursos públicos.
El tribunal determinó acreditar la vulneración a los principios de equidad y neutralidad porque el Presidente emitió expresiones de índole electoral, que si bien no fueron llamados expresos al voto o a no votar por una candidatura, sí fueron mensajes tendientes a apoyar a Morena.
Respecto a los programas sociales, expuso que aun cuando no hubo un condicionamiento formal, sí se restringe su entrega a la permanencia en su partido.