Esta tarde, al cumplirse 50 años del , el presidente López Obrador sostuvo un encuentro en Palacio Nacional con una docena de sobrevivientes del “ Jueves de Corpus ” y de familiares de víctimas de la Guerra Sucia , en donde, aseguraron, se comprometió a apoyar un plan de ruta para la búsqueda de desaparecidos , reparación del daño, así como acceso a la verdad, la justicia y la memoria.

Acompañados por Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, y al salir del inmueble con el puño en alto, los familiares calificaron de “inédito” el encuentro y como “un gran avance”.

Héctor Pineda Santiago, hijo del profesor Víctor Pineda, desaparecido por militares en 1978, detalló que se estableció el compromiso de trabajar en la ruta de atención a familiares de víctimas de la Guerra Sucia, tanto desaparecidos, presos políticos y sobrevivientes.

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“Hay una buena expectativa de atención a los familiares, hay una buena relación, históricamente se había abandonado a todos los familiares de víctimas de la Guerra Sucia, pero hoy vemos una disposición de este gobierno y esto es importante celebrarlo.

"Se está elaborando con la Subsecretaría los Derechos Humanos un plan integral que se va a estar presentando en una mesa de trabajo y mediante esa mesa se esperan recuperar todas las cuestiones que tienen que ver tanto de la Guerra Sucia como de los tiempos más recientes", dijo.

-¿Les plantearon la reparación del daño?, se le cuestionó.

Es un asunto que se va a platicar en las mesas de trabajo, pero lo fundamental es que haya atención.

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“Que el Presidente ofrezca esas disculpas públicas como Estado mexicano es digno de reconocerse y ojalá que esto permita que haya como lo está haciendo ahora una mayor atención al tema de derechos humanos”, comentó.

Tita Radilla Martínez, vicepresidenta de la Asociación de Familiares de Detenidos y Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos (AFADEM) e hija de Rosendo Radilla Pacheco, activista desaparecido en 1974 en Guerrero, indicó que en un mes y medio se tiene listo este plan, el cual será elaborado por los familiares y sobrevivientes -acompañados por especialistas-, por lo que podrían de nueva cuenta reunirse con el Presidente de la República.

“Vamos a estar trabajando con el subsecretario, con el equipo y bueno en un mes y medio si ya tenemos una propuesta nos reunimos nuevamente con el señor Presidente. Para mí una de las cosas más importantes en esta reunión es que se comprometió a la búsqueda y localización de nuestros familiares desaparecidos de aquel momento. Todos tenemos que participar para que se pueda llevar a cabo y podamos lograr la reparación, la verdad y la justicia y la memoria”.

“¿Con qué se queda usted de esta reunión?”, se le preguntó.

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“Me quedo con la esperanza, pensando en que se puede lograr, encontrar la verdad, saber la verdad y que se haga justicia. Él habló también de pedir perdón a las familias por los hechos ocurridos. Fue una buena reunión”, contestó mientras sostenía la fotografía de su padre desaparecido hace 47 años en Guerrero.

Al mismo tiempo, unos 200 manifestantes marcharon de San Cosme al Zócalo, para exigir justicia y conmemorar el medio siglo de esta represión, cuyo número de heridos y muertos a la fecha se desconoce.

Este jueves se cumplieron 50 años de la represión de que fueron objeto estudiantes del IPN y de la UNAM, el 10 de junio de 1971 , quienes se manifestaban contra una nueva Ley Orgánica para la Universidad Autónoma de Nuevo León, contraria a la demanda de democratización de las instituciones de educación superior de la comunidad estudiantil.

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