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Al continuar con sus críticas a la UNAM, el presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a que se reforme la institución, pues acusó que en años pasados fue tomada y puesta al servicio del régimen.
“Nosotros vamos a ser siempre respetuosos de la autonomía universitaria, a seguir impulsando la educación pública. La UNAM es una gran Universidad, no han podido destruirla, es tan importante por su cuerpo académico, por sus investigadores (…).
“Se fortaleció mucho la UNAM, luego, ya fue tomada, puesta al servicio del régimen y se cooptó a académicos que se convirtieron en ideólogos del neoliberalismo, sobre todo en el gobierno de Salinas, y ya no se tocaron los grandes y graves problemas nacionales en la UNAM.
“Entonces, eso es lo que nosotros planteamos, de que tiene que reformarse la Universidad, porque incluso se salvó, porque querían cobrar cuotas, privatizar”, dijo.
Afirmó que su gobierno siempre apoyará a la institución, no le faltarán recursos, así como a otras universidades públicas, pero opinó que la UNAM no debe ser un instrumento para mediatizar la educación, sino un factor para la libertad, para el ejercicio de los derechos de los ciudadanos, la toma de conciencia y la solidaridad.
Comparó el lema de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) —que él fundó— con el cambio que ha habido en la UNAM: “La educación tiene que ser un factor para la libertad, que el que estudia ponga sus conocimientos, una vez que termina una carrera, al servicio de la sociedad, lo que es el lema de la Universidad de la Ciudad de México ‘Nada humano me es ajeno’, y en la UNAM en los últimos tiempos parece que lo humano les era ajeno, ¿no veían cómo estaban saqueando al país?, y no generalizo, desde luego”, argumentó.
Señaló que pese a ese proceso, la Universidad continúa preparando alumnos con buena formación social, como los egresados del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH).
Cuestionado sobre presuntas irregularidades en el manejo del presupuesto de la UNAM y el salario del rector Enrique Graue, superior a 200 mil pesos al mes, López Obrador indicó que “es importante que se ventilen esos asuntos”.
Comentó que pese a que José Narro dejó de ser rector de la UNAM desde hace varios años, aún sigue siendo una persona con influencia dentro de la institución: “Y ahora que está la polémica tan buena sobre la UNAM y los rectores, el doctor Narro es una gran influencia en la UNAM, delegado del PRI en Ecatepec, y sigue siendo muy influyente”, insistió.
“Es muy importante el debate y si así está la UNAM, imaginen cómo están otras universidades”, manifestó.
López Obrador también criticó que durante más de 30 años, Raúl Padilla, pese a que no es rector, ha mandado en la Universidad de Guadalajara (UdeG) y reprochó que España lo haya condecorado con el Príncipe de Asturias por la Feria Internacional del Libro de Guadalajara.
