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Al agradecer a empresarios que asistieron a la cena que ofreció en Palacio Nacional para promover la compra de boletos para la rifa del avión presidencial, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que hubo compromisos por alrededor de mil 500 millones de pesos, es decir, adquirir casi 3 millones de cachitos, por parte de 75 empresarios.
En conferencia de prensa en Palacio Nacional, el Mandatario federal afirmó que con estas cifras, ya se tiene asegurada la mitad del monto de lo esperado obtener de la venta de los 6 millones de boletos del sorteo, que es de 3 mil millones de pesos.
“Quiero informar a todos los mexicanos, transmitirles mi satisfacción, porque en la reunión que tuvimos con empresarios todos expresaron su apoyo. Sin que tomaran la palabra hubo una manifestación de respaldo a la decisión que se tomó de rifar el avión presidencial. No hubo desaire, los convocamos y participaron, y se les hizo una exposición del porqué se toma la decisión de rifar la cantidad de dinero que significa el valor de ese avión.
“Ya obtuvimos compromisos de dispersión, compra de boletos por la mitad de los 3 mil millones que estamos pensando obtener, es decir, hubo compromisos por mil 500 millones de pesos.
“Alrededor de mil 500 millones. Estamos hablando como de 3 millones de boletos, casi la mitad. A finales de este mes ya la Lotería empieza a distribuirlos, pero la verdad, estoy muy contento y les agradezco mucho a los empresarios”, dijo.
—¿Cuántos empresarios se comprometieron? —se le preguntó.
—Setenta y cinco empresarios —respondió y aseguró que la cena estuvo muy bien, los tamales de chipilín, exquisitos.
López Obrador confirmó que en la cena se entregó una carta compromiso que se difundió en redes sociales y la cual, detalló, fue llenada por los empresarios que se comprometieron con la compra de boletos y cuyos ingresos serán canalizados a la compra de aparatos médicos para hospitales públicos.
“Todavía estábamos terminando la cena y ya la hoja andaba en las redes, pero es cierta la hoja, así fue, porque teníamos que tener un registro y esa hoja la llenaron quienes participaron, ellos le pusieron cuánto, firmaron y la depositaron en una ánfora”, detalló López Obrador.
En la carta compromiso se ofrecían cuatro opciones de compra y que debería ser marcado por aquellos empresarios que quisieran comprar los boletos. La primera opción a marcar era por un monto de 20 millones de pesos que corresponde a 40 mil cachitos; la segunda por 50 millones de pesos correspondiente a la compra de 100 mil boletos; la tres por 100 millones de pesos, para adquirir 200 mil boletos, y la última equivalió a la compra de 400 mil boletos que representa un desembolso de 200 millones de pesos.
Esperan más apoyo
El Jefe del Ejecutivo federal indicó que en los próximos días esperan que más empresarios se comprometan con la compra de estos boletos, “porque algunos no pudieron estar, están fuera del país o en otras actividades, pero nos mandaron decir que ellos participan, o sea, que está abierta la participación”, insistió.
Señaló que la información de los empresarios que se comprometieron a comprar boletos quedó en resguardo de Banobras y la Presidencia de la República. “¿Y por qué Banobras? Porque no firmaron cheques, sino era carta compromiso, dejaron ahí sus datos, ya se va a entrar en comunicación con ellos para la entrega de los boletos a finales de este mes, cuando ya se tengan las ediciones, las series de los cachitos, ellos ya van a decidir qué hacer”.
El Presidente informó que en la cena se les dijo a los empresarios que los servidores públicos deben actuar con austeridad, “vivir en la justa medianía como lo proponía el presidente Benito Juárez, que son dos cosas distintas, lo privado y el servicio público, y a los servidores públicos lo único que les debe interesar son los negocios públicos”.
López Obrador manifestó que los empresarios tienen el derecho de usar su dinero de la forma que quieran, y darse la vida que quieran, “tener carros de lujo y es muy distinto el comportamiento que debe seguir el proceder de un servidor público, no puede un funcionario actuar con extravagancias.
“¡Cómo un servidor público va a tener aviones y helicópteros de lujo y va a actuar de manera faraónica! Cuando se decide que los funcionarios ya no puedan utilizar aviones y helicópteros privados, y se aplica una política de austeridad, se está mandando un mensaje claro.
