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Aunque omitió nombrarlo, el presidente Andrés Manuel López Obrador acusó de tráfico de influencias, corrupción y coyotaje al ex presidente Felipe Calderón porque en su momento fue consejero asesor de una empresa contratada durante su sexenio (2006-2012) para venderle energía a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
El jefe del Ejecutivo federal se refirió a la empresa Avangrid, filial de la española Iberdrola, compañía que invirtió en México principalmente en la generación de energías limpias. En 2016, esa compañía incorporó al ex presidente Calderón Hinojosa a su consejo de administración.
“Una empresa, de éstas que le vende energía eléctrica a la CFE, contrató a un ex presidente como miembro de su consejo de administración. Un presidente de la República que pasa a ser, cuando termina, consejero de una empresa extranjera que le vende energía eléctrica a la CFE.
“No sólo fue a este ex presidente, sino quienes estaban en la Secretaría de Energía terminaban y se iban a trabajar a empresas a las que les habían dado contratos con subsidio. ¿Cómo se le llama a esto?: conflicto de intereses, coyotaje, corrupción”, criticó.
López Obrador aclaró que cuando termine su sexenio no será consejero de ninguna empresa extranjera.
Adelantó que la próxima semana el titular de la CFE, Manuel Bartlett, dará a conocer el plan para el sector de la energía eléctrica, puesto que empresas privadas siguen recibiendo subsidios del gobierno, algo que, afirmó, no sucede en ninguna parte del mundo.
Advertencia al Poder Judicial. En su conferencia de prensa matutina, López Obrador lanzó una advertencia a jueces, magistrados y ministros acerca de que si protegen a delincuentes de cuello blanco o solapan actos de corrupción serán denunciados por el gobierno federal.
Coloquialmente, el jefe del Ejecutivo federal remató su rueda de prensa mañanera con la frase: “El pueblo se cansa de tanta pinche transa, para que quede claro”.
“Cualquier juez, magistrado, ministro que proteja a un delincuente de cuello blanco, que solape un acto de corrupción, cuando menos va a ser denunciado, cuando menos. Nada de que me voy a quedar callado, una cosa es el respeto a otro poder y otra cosa es que sabiendo que hubo una transa me quede yo callado, porque no voy a ser cómplice”, sentenció, luego de que el Presidente confirmara que su gobierno intervino ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para evitar que se le devolvieran millones de pesos en impuestos a ex accionistas de Grupo Modelo.
Los enviados de López Obrador a la Corte fueron el consejero jurídico de la Presidencia, Julio Scherer, y la titular del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Margarita Ríos, para hablar con los ministros “de manera respetuosa”.
El mandatario aclaró que “una cosa es ordenarles” a los ministros de la Corte y otra es presentar, como lo puede hacer cualquier persona, argumentos y que se escuche a las partes antes de que se emita una resolución.
El Presidente recordó que había la mala costumbre de que los grandes contribuyentes no pagaban impuestos o cuando los pagaban se les devolvían millones de pesos.
Dijo conocer a abogados muy influyentes, opositores al gobierno, que negociaban y obtenían para sus clientes la devolución de impuestos de hasta 12 mil millones de pesos.
Respeta liberación de Padrés. Por otro lado, luego de que un juez dictó libertad provisional al ex gobernador de Sonora Guillermo Padrés Elías, el Presidente se dijo respetuoso de esa decisión del Poder Judicial y manifestó que su gobierno no obligará a los jueces a castigar a sus opositores.
Sostuvo que su gobierno no tiene fobias contra nadie y por eso no perseguirá a opositores.
En otro tema, López Obrador defendió los nombres de las mujeres que integran la terna para relevar a la ministra Margarita Luna Ramos, puesto que afirmó que tienen buen nivel, con mérito propio y no hay impedimento constitucional para que miembros de un partido político puedan ser postulados a un cargo, luego de que se diera a conocer que Celia Maya, Loretta Ortiz y Yasmín Esquivel son cercanas al Presidente.
Más tarde, el mandatario se reunió en privado con el gabinete legal y ampliado, a quienes llamó a que cumplan con la austeridad y eviten la burocratización en las dependencias para que haya eficacia en el gobierno.
En el encuentro con sus funcionarios en el Salón Tesorería del Palacio Nacional, el Presidente también revisó el avance de la labor de los superdelegados en los estados del país, así como los 25 programas prioritarios, los 67 programas del gobierno federal y el censo del bienestar.
Según el vocero Jesús Ramírez, el gobierno encontró padrones que no sirven, como el de Prospera, Sedesol y hasta el de Hacienda.
“No tiene la base de datos de los programas de las administraciones pasadas, por lo cual no se sabe en muchos casos, como en el IMSS, que no tiene una base única de padrón. No hay manera de contrastar en estos momentos y estamos haciendo un padrón de cero”, expuso.
