Señor Director:
Con relación a la columna autoría de Raúl Rodríguez Cortés, publicada el 14 de los corrientes, es importante señalar que la mayoría del contenido es impreciso, falso e incluso calumnioso. Pareciera dicha pieza, una nueva versión de una serie de señalamientos de los que fui objeto durante las recientes campañas electorales, y que quedaron debidamente aclarados.
Comprendo el interés de sus lectores, dada la actividad política y empresarial que su servidor desempeña; por respeto a ellos y en honor a la verdad, respetuosamente le preciso que, no existe tal “red” de empresas como lo asegura el columnista, por el contrario, su servidor es socio de un corporativo empresarial en el ramo de insumos para la salud, entre otros.
Las empresas integradas a dicho corporativo han sido reconocidas a nivel nacional por manejar los más altos estándares de calidad, con un novedoso sistema que genera ahorros de hasta 40% para las instituciones públicas que han contratado sus servicios.
La bondad de este sistema radica en que sólo se suministra el medicamento que habrá de entregarse de manera directa al beneficiario, eliminando así el stock de medicamento con riesgo a que se caduque; también elimina el pago de almacenamiento, traslado, robos, personal excesivo, etc.
Lamento profundamente el proceder abusivo de otras empresas sin escrúpulos, cuyo único objetivo es vender para obtener ganancias económicas, generando círculos de corrupción y complicidades, a través del llenado de la bodega de medicamentos de las instituciones públicas sin importar que su destino sea la caducidad.
En forma categórica niego relación alguna tanto con el ex secretario de Salud Jalisco como con la empresa, señalados en la columna de opinión.
Asimismo, los bienes muebles e inmuebles propiedad de su servidor, así como los participantes accionarios se encuentran debidamente expresadas en mi declaración 3de3 que puede consultarse en: http://carloslomeli.com.mx/ wp-content/uploads/2018/05/ 3-de-3. pdf
Atentamente
Dr. Carlos Lomelí