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Carmen Sánchez se encuentra en su cirugía número 65, ya que hace nueve años recibió un ataque con ácido por parte de su expareja Efrén García, la cual dejo diversas secuelas en la mitad de su rostro, cuello, pecho y piernas. La activista se ha sometido también a diversos tratamientos dermatológicos para la piel y la larga lucha para obtener justicia.
Cabe mencionar, las últimas cuatro cirugías que ha recibido han sido costeadas por la Comisión Ejecutiva de atención a Víctimas del Estado de México (CEAVEM), esto fue posible a la ardua labor de la fundación que lleva su nombre.
Además de recibir acompañamiento psicológico, terapia física, medicamentos especializados, y también acompañamiento de su red.
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El pasado 11 de mayo se dictó la primera sentencia en México y América Latina que castiga la agresión con ácido en tentativa de feminicidio.
Tras 9 años del ataque con ácido de la cual fue víctima Carmen Sánchez, su agresor, Efrén García, recibió una sentencia de 46 años y 8 meses.
García Ramírez recibió una sentencia de 46 años y 8 meses. Una multa de 212 mil 545 pesos y la cantidad de 3 millones 987 mil 208 pesos como reparación del daño material.
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La “violencia ácida” es denominada por la Comisión Nacional Para Prevenir la Discriminación (Conapred) como “agresiones con una altísima carga simbólica que pretenden marcar de por vida, dejar el rostro desfigurado y en el cuerpo de la víctima la estampa de su crimen, de sus celos, de su odio”.
La comisión señala que el ácido y otras sustancias corrosivas son utilizados en muchos países como un arma que no sólo pretende causar un sufrimiento físico enorme, sino también para imponer una condena social.
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tjm