La Universidad de Carolina del Norte, en la localidad estadounidense de Chapel Hill, fue sitiada este lunes durante horas por la presencia de un "peligroso hombre armado", que, según el centro educativo, ya ha sido detenido.
"Esta es una forma trágica de iniciar un nuevo semestre y el estado proveerá toda la ayuda necesaria para apoyar a la comunidad universitaria", dijo el gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper.
Mientras la alerta estuvo activa, la universidad pidió a los estudiantes que estuvieran en la zona que se resguardaran y solicitó al resto que no se acercara.
Según contó un testigo a CNN, muchos de los alumnos se encerraron en los edificios del centro educativo, mientras agentes armados registraban el campus.
Sin embargo, un video distribuido en redes muestra a algunos alumnos saltando por la ventana, para huir del atacante.
La universidad cuenta con unos 32 mil estudiantes, más de 4 mil profesores y 9 mil empleados.
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La universidad emitió una primera alerta poco después de las 13:00 hora local de Carolina del Norte, indicando que había una persona peligrosa y armada "dentro o cerca" de las instalaciones.
Tres horas y cuarto después, tanto la Policía local como ese centro universitario indicaron en X (anteriormente Twitter) que la situación se había resuelto. Ninguno de las cuentas informaron de la existencia de víctimas. Sin embargo, la universidad confirmó que murió un miembro de la facultad.
La fotografía oficial sobre el sospechoso correspondía a un joven de rasgos asiáticos.
Mientras la alerta estuvo activa, la universidad pidió a los estudiantes que estuvieran en la zona que se resguardaran y solicitó al resto que no se acercara.
Según contó un testigo a CNN, muchos de los alumnos se encerraron en los edificios del centro educativo mientras agentes armados registraban el campus.
El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, dijo que había "prometido todos los recursos estatales necesarios para capturar al tirador y proteger el campus de la UNC"
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"Esta pérdida es devastadora y el tiroteo dañan la confianza y la seguridad que tan a menudo damos por sentadas en nuestra comunidad universitaria", dijo el canciller de UNC-Chapel Hill, Kevin Guskiewicz. Pidió disculpas a los estudiantes que "se sienten inseguros en este momento".
El tiroteo se produjo en los Laboratorios Caudill, que están cerrados mientras se procesan las pruebas, dijo el jefe policial Brian James. Dijo que se desconoce el motivo y que no se ha encontrado el arma.
La noticia del tiroteo y el posterior bloqueo paralizaron el campus y parte de la ciudad de Chapel Hill, una semana después del inicio de las clases en la universidad pública más importante del estado.
Durante el cierre, una estudiante dijo a la cadena de televisión WTVD que había atrincherado la puerta de su dormitorio con sus muebles. Otro estudiante, que hablaba en voz baja, describió cómo se escondió atemorizado con otros en un cuarto de baño oscuro.
Adrian Lanier, estudiante de segundo año de informática, dijo a The Associated Press que él y otros se sentaron contra una pared, tratando de mantenerse lo más lejos posible de puertas y ventanas. Esperaron durante horas mientras se extendían los rumores.
"Nadie se sentía lo bastante seguro como para salir. Yo no", dijo Lanier.
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