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Estalló una fuerte indignación en Brasil al circular en redes sociales videos de un hombre afroamericano siendo golpeado por guardias de seguridad en un supermercado en Porto Alegre, justo en vísperas del Día de la Conciencia Negra . El hombre murió.
Un clip breve muestra a un guardia sujetando a João Alberto Silveira Freitas en la puerta de un supermercado Carrefour mientras otro le da puñetazos en la cara. Un empleado del mercado grabó las imágenes.
En un comunicado, Carrefour deploró la “muerte brutal” de Freitas y dijo que tomará “las medidas apropiadas para detener a las personas responsables de este acto criminal”. Dijo que anulará su contrato con la empresa de seguridad, despedirá al gerente de turno de la tienda y cerrará la tienda por respeto a la víctima.
El gobernador del estado de Rio Grande do Sul, Eduardo Leite, dijo en un video en Twitter en el cual aparece junto a los jefes de las policías civil y militar que se investigaba el hecho y que las personas implicadas estaban presas.
También destacó medidas recientes del estado para combatir la intolerancia racial.
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“Desgraciadamente, en este día en que deberíamos estar celebrando esas políticas públicas, nos encontramos con escenas que provocan indignación debido a la violencia excesiva que provocó la muerte de un ciudadano negro en un supermercado”.
El Día de la Conciencia Negra es un feriado en muchas partes de Brasil, donde las personas negras y de raza mixta constituyen el 57% de la población, pero el 74% de las víctimas de la violencia letal, según la ONG Foro Brasileño de Seguridad Pública.
El sitio noticioso local GH1 informó que Freitas se enfrentó con un empleado del supermercado, el que llamó a seguridad. Los guardias eran blancos, según G1.
Uno de los hombres que golpeó a Freitas era un agente de la policía militar que estaba fuera de servicio, dijo el jefe de la policía militar estatal en el video junto con el gobernador.
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La cadena francesa de supermercados ha causado polémicas anteriormente en Brasil.
En agosto, un hombre murió en un local de Carrefour en Recife, una ciudad del nordeste; su cuerpo estaba cubierto con paraguas y la tienda continuó abierta durante varias horas. Carrefour ofreció disculpas y dijo que modificaría sus protocolos para cerrar sus tiendas en caso de ocurrir alguna muerte.
lsm
