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Houston.— Sadie Rodríguez, madre de Shana Fisher, de 16 años, una de las 10 personas que el pasado viernes fueron fatalmente acribilladas en la escuela Santa Fe, en el suroeste de Texas, declaró ayer que una semana antes su hija rechazó intenciones románticas del atacante Dimitrios Pagourtzis, al tiempo que los familiares de las víctimas se concentraron en las iglesias, en busca de ayuda espiritual, y se informó que el joven parecía “extrañamente sin emociones” después del tiroteo.
Rodríguez dijo en comentarios a la prensa que Pagourtzis había hecho repetidos “avances” románticos hacia su hija en los cuatro meses previos a la balacera. Pagourtzis salió una vez con la mejor amiga de Fisher, comentó Rodríguez. El joven se volvió más agresivo, una semana antes del tiroteo, Shana “finalmente se enfrentó a él y lo avergonzó”, afirmó. En declaraciones a Los Ángeles Times, Rodríguez dijo: “Una semana más tarde abre fuego contra todos los que no le gustaban”.
La familia Pagourtzis emitió un comunicado en el que dijeron que “compartían el hambre del público por respuestas sobre por qué sucedió esto”. El vicegobernador de Texas, Dan Patrick, reconoció las declaraciones de Rodríguez, pero le dijo que “en términos de cualquier motivo real, la policía todavía está investigando las publicaciones escritas, inspeccionando las computadoras y teléfonos, estoy seguro”. Patrick también sugirió que los tiroteos se deben a “demasiadas entradas y salidas en los planteles”.
El vicegobernador, quien fue respaldado por la Asociación Nacional del Rifle (NRA) con una calificación de “A” en las elecciones generales de 2014, también dijo que los padres deben asegurar sus armas en casa. “Asegúrese de que sus hijos y nietos o cualquier persona que pueda tener acceso a su casa no pueda obtener sus armas”, dijo Patrick, quien también respaldó la idea de armar a los maestros para proteger a sus alumnos.
Las autoridades identificaron a los ocho estudiantes y dos maestros que murieron en el tiroteo. Los docentes fueron identificados como Glenda Perkins y Cynthia Tisdale, de 64 años. Entre las víctimas se encuentra una estudiante de intercambio de Paquistán, identificada como Sabika Sheikh, de 17 años y de quien se realizó su servicio fúnebre. “Por favor, tengan a las familias en sus pensamientos mientras lloran esta trágica pérdida”, dijo el procurador del condado de Galveston, Jack Roady, en un comunicado que acompañaba la lista de víctimas en el colegio.
Nicholas Poehl, uno de los dos abogados contratados por los padres de Pagourtzis para representarlo, dijo que estuvo una hora con el sospechoso el viernes por la noche y el sábado. “Él es muy emotivo y extrañamente parecía sin emociones”, dijo el abogado cuando se le pidió que describiera el estado de ánimo de su cliente. “Hay aspectos que entiende y hay otros que no”. El joven permanece detenido en régimen de aislamiento en la cárcel del condado de Galveston sin fianza, acusado de asesinato capital y agresión con agravantes contra un servidor público.
