LIMA.- El Gobierno de Uruguay negó una solicitud de asilo del expresidente peruano Alan García , quien es investigado por presuntamente haber recibido sobornos de la constructora brasileña Odebrecht , dijo el lunes el canciller peruano, Néstor Popolizio.
El embajador de Uruguay en Perú, Carlos Barros, confirmó que el exmandatario García abandonó la residencia uruguaya en Lima, a la que ingresó el 17 de noviembre para pedir el asilo.
"Ellos habían hecho una evaluación jurídica de todos los aspectos y donde llegaban a la conclusión que no hay persecución política" en Perú, dijo Popolizio a la radioemisora local RPP.
García es investigado por presuntamente haber recibido sobornos de la constructora brasileña Odebrecht por el contrato para la construcción de un tren en Lima, además de 100 mil dólares de un fondo oscuro de la firma por una conferencia.
El exmandatario, que gobernó Perú en dos periodos, ha rechazado todas las acusaciones y se declaró perseguido político en su solicitud de asilo.
El Gobierno del presidente peruano Martín Vizcarra había entregado a Uruguay una nota diplomática en la que explicó que en el país andino hay una democracia y no existe persecución política.
"Esta decisión preserva el buen estado y el buen nivel de las relaciones bilaterales entre Perú y Uruguay", dijo Popolizio.
El expresidente García, de 69 años, no puede salir del país mientras los fiscales investigan el presunto caso de corrupción, por orden de un juez.
Esta la segunda vez que García pide asilo en un país sudamericano cuando encara investigaciones judiciales.
En 1992, luego de un autogolpe del expresidente Alberto Fujimori cuando cerró el Congreso, García ingresó a la embajada de Colombia en medio de acusaciones de corrupción y enriquecimiento ilícito durante su primer Gobierno.
Colombia le concedió el asilo y García vivió cerca de 10 años entre Bogotá y París. Tras la caída de Fujimori, luego de un escándalo de corrupción, García pudo volver a Perú en 2001 cuando la justicia declaró prescritos los delitos.
El caso de sobornos que involucra a Odebrecht ha salpicado a los cuatro últimos expresidentes de Perú. Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski están enfrentando investigaciones, mientras que sobre Alejandro Toledo pesa un pedido de extradición desde Estados Unidos.