Osaka, Japón.— El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, le pidió ayer a su par ruso que no se entrometa en la próxima elección en su país, en un aparente intento por restar importancia a un escándalo que generó una investigación sobre la posible injerencia rusa en los comicios de 2016.

Trump y el presidente ruso, Vladimir Putin, hablaron con periodistas en la ciudad japonesa de Osaka, en el marco de la cumbre del G20.

Trump se dirigió al mandatario ruso moviendo un dedo en señal de negación. “No se inmiscuya en la elección, por favor”, sostuvo. El mandatario ruso, atento a la traducción, sonrió.

Trump ha sido criticado en Estados Unidos por ser demasiado cercano a Putin y por no haber confrontado públicamente al líder ruso en Helsinki, después de que servicios de inteligencia concluyeran que agentes rusos realizaron ataques informáticos a las computadoras del Partido Demócrata y usaron cuentas falsas en redes sociales para atacar a su rival en la elección de 2016, la demócrata Hillary Clinton.

La reacción demócrata no se hizo esperar. El líder del bloque de senadores demócratas, Chuck Schumer, dijo que el blanco del chiste es Estados Unidos y “el único que ríe aquí es Putin”.

El expresidente estadounidense Jimmy Carter reaccionó con frases más duras, al opinar que la injerencia rusa llevó a Trump a la Casa Blanca. “No cabe duda de que los rusos interfirieron en la elección”, dijo Carter. “Creo que la injerencia, aunque no está cuantificada, si se le investigara exhaustivamente demostraría que Trump no ganó la elección en 2016. Perdió y obtuvo el cargo porque Rusia interfirió”.

En el G20, otro video fue difundido más tarde, antes de que entraran los periodistas en el lugar. “Las fake news [noticias falsas], ustedes no tienen ese problema en Rusia”, declaró Trump, dirigiéndose a Putin. “Sí, sí tenemos ese problema”, respondió el ruso en inglés.

El presidente estadounidense también mantuvo una reunión bilateral con el jefe de Estado brasileño, Jair Bolsonaro, en la que abordaron la crisis en Venezuela.

Discutieron posibles medidas para cortar “el apoyo financiero de todos los países que ayudan a Venezuela”, dijo el portavoz de Bolsonaro, Otávio Rego Barros. En la jornada también se anunciaron sanciones contra “Nicolasito” Maduro, hijo del presidente venezolano.

En el día, también destacaba la reunión entre el magnate con Xi Jinping, mandatario chino.

Trump dijo que logró algunos avances en las negociaciones sobre la guerra comercial con China y confirmó que ambos hablarán en su reunión formal sobre la empresa china Huawei.

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