Washington.— El mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, exigió ayer, en un tuit, la apertura de una investigación sobre una posible “infiltración” de su campaña presidencial por agentes del FBI con fines políticos, al tiempo que se informó que Robert Mueller, fiscal especial que indaga la injerencia rusa en las pasadas elecciones, planea acabar antes del 1 de septiembre sus pesquisas.
El mandatario tuiteo: “Exijo aquí, y mañana [hoy] lo haré oficialmente, que el Departamento de Justicia investigue si el FBI infiltró o vigiló la campaña de Trump con fines políticos”. El presidente estadounidense dijo además que se debe saber si “esas peticiones o solicitudes fueron hechas por personas de la administración [del ex mandatario, Barack] Obama.
“¿En qué momento para esta caza de brujas?, compuesta de 13 demócratas enfadados y llenos de conflictos y de dos personas que han trabajado durante ocho años para Obama”, preguntó el magnate.
El presidente citó un artículo publicado este sábado en The New York Times, según el cual un emisario de Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos se reunió en agosto de 2016 con el hijo del ahora mandatario, Donald Trump Jr., con el objetivo declarado de ayudar al entonces candidato republicano en las elecciones de ese año.
Desde hace días, el magnate ha repetido también, sin presentar hasta ahora pruebas, la teoría, que han divulgado algunos medios de comunicación, según la cual un miembro del FBI pudo haber infiltrado su campaña con fines políticos. Según The New York Times, el FBI solicitó a un informante reunirse con miembros del equipo de Trump, para investigar sobre eventuales vínculos entre ellos y Rusia.
Legisladores demócratas acusan a la Casa Blanca y a los republicanos de querer realmente desestabilizar a Mueller, quien lleva un año investigando la posible colusión entre Moscú y el equipo de campaña de Trump para ganar los comicios de 2016 a Hillary Clinton.
El asesor legal presidencial Rudolph Giuliani declaró ayer que Mueller ya tiene fecha para cerrar su indagatoria: antes del 1 de septiembre. Mencionó a The New York Times que prolongar esas pesquisas más allá de ese lapso podría afectar a las elecciones legislativas parciales de noviembre próximo. El ex alcalde de Nueva York citó el efecto que tuvo en la última campaña electoral las revelaciones del entonces director del FBI, James Comey, de que iba a reabrir las investigaciones sobre el uso de un servidor privado de correo electrónico de parte de la aspirante presidencial Hillary Clinton para comunicaciones oficiales cuando era secretaria de Estado.
“No se desea repetir las elecciones de 2016 en las que se dan a conocer informes negativos al final y no sabes cómo pudo afectar a esos comicios”, afirmó Giuliani. Según el asesor legal de Trump, Mueller dio a conocer el calendario de sus actuaciones hace dos semanas como parte de las negociaciones sobre si el republicano será interrogado por los investigadores del caso. Las posibles maniobras del republicano en las investigaciones sobre la trama rusa es una de las vertientes del caso, que será siendo investigado por Mueller más allá del papel que pudo tener Trump.
Entre otros puntos, Mueller quiere establecer si el magnate pidió a Comey que cerrara las investigaciones de su entonces consejero de Seguridad Nacional, Michael Flynn, y su posible papel en la trama rusa, y si ello podría ser interpretado como un intento por entorpecer las pesquisas.
Giuliani dijo que el equipo legal de Trump y la oficina de Mueller siguen negociando los términos de la entrevista que dará el presidente estadounidense sobre el caso al equipo del fiscal especial, para la que no hay fecha todavía. Según el asesor legal de Trump, piensa que la preparación que exige esa entrevista no puede distraer actividades presidenciales como la cita con el líder norcoreano, Kim Jong-un, el 12 de junio, por lo que calcula que el gobernante puede ser interrogado por el equipo de Mueller hacia comienzos de julio.