Mientras Donald Trump, presidente estadounidense, consideró que los votantes de Alabama deben decidir si Roy Moore, candidato republicano al Senado por ese estado, llega a la Cámara Alta a pesar de las acusaciones de abuso en su contra, la modelo y locutora Leeann Tweeden denunció por acoso a Al Franken, senador demócrata por Minnesota.
“El mandatario cree que estas acusaciones son muy preocupantes, deberían tomarse en serio y que el pueblo de Alabama debería tomar la decisión de quién creen que debería ser su senador”, dijo la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee.
Trump consideró que “si las acusaciones son ciertas, Moore debería retirarse” de la carrera para las elecciones legislativas del próximo 12 de diciembre en Alabama, añadió. Sanders insistió en que el presidente “se toma muy en serio” las acusaciones contra Moore, pero no quiso aclarar si cree lo que dicen las mujeres que han acusado al candidato. Dijo que “eso probablemente debería determinarse en un tribunal”.
Moore compareció ayer en un acto de campaña en Alabama para criticar a quienes han pedido su renuncia, asegurar que su candidatura sigue en pie y tachar las acusaciones de “no corroboradas”. “Seguiré en pie”, garantizó el candidato republicano, quien declaró que “quien tiene que renunciar es Mitch McConnell”.
En otro caso de acoso, la modelo y locutora Leeann Tweeden, en un texto publicado en el sitio web de TalkRadio 790 KABC de Los Ángeles, medio en el que trabaja, acusó al senador Al Franken de “besarla de forma forzosa” y de “agarrarle los pechos mientras dormía” en una gira de entretenimiento para soldados desplegados en zona de conflicto en 2006.
Según el relato de la mujer, ambos compartían escena en un guión escrito por Franken, en el que tenían que besarse. El actual senador, por entonces un reconocido actor cómico, insistió en “ensayar” el momento de beso, algo a lo que Tweeden accedió para que dejara de presionarla. “Dijimos la frase que llevaba al beso y entonces vino, puso su mano detrás de la cabeza y aplastó sus labios contra los míos, encajando de forma agresiva su lengua en mi boca”, escribió.
El texto de denuncia incluye una foto en la que aparece dormida con traje de soldado y Franken inclinándose hacia ella con el gesto de querer agarrarle los pechos.
Tweeden afirma que miró la foto hasta que estaba de regreso en EU y vio el disco que le dio el fotógrafo. “No podía creerlo. Me manoseó, sin mi consentimiento, mientras estaba dormida. Me sentí violada una y otra vez. Avergonzada, denigrada y humillada”. Afirmó: “No tengo miedo. Senador Franken, usted escribió el guión —de la escena del beso—, pero las agresiones sexuales no tienen nada de gracioso”. Franken emitió un escueto comunicado con sus “más sinceras disculpas”. Aseguró “no recordar” el episodio del beso. La intención de la imagen, explicó, era “ser graciosa, pero no lo era”.
Las críticas a Franken no se hicieron esperar. La senadora demócrata Kirsten Gillibrand calificó la denuncia de “profundamente preocupante”, mientras McConnell y el senador demócrata Chuck Schumer pidieron que el Comité de Ética revise el caso.
*Con información de Agencias.