Washington.— El presidente estadounidense Donald Trump aceptó cerrar su fundación de caridad, la Trump Foundation, acusada de “persistente conducta ilegal”, dijo ayer la fiscal general de Nueva York, Barbara Underwood.
Underwood indicó que la fundación será disuelta y sus activos serán distribuidos entre otras obras de caridad. “Es una importante victoria para el estado de derecho, dejando en claro de que las normas son iguales para todos”, afirmó la fiscal en un comunicado. Underwood acusa a la Fundación Trump de ser un “escandaloso modelo de ilegalidad, incluyendo una coordinación ilegal con la campaña presidencial de Trump, reiterada y deliberada autogestión y mucho más”. “Esto es lo mismo que decir que la Fundación Trump funcionaba como un talonario de cheques al servicio de los intereses económicos y políticos del Sr. Trump”, afirmó en el comunicado.
Underwood inició un proceso legal contra la Fundación Trump en junio, acusándola de “persistente conducta ilegal”. La demanda, que seguirá adelante a pesar de la decisión de disolver la entidad, reclama millones de dólares de indemnizaciones y multas, en tanto busca prohibir a Trump, a sus hijos Eric y Don Jr., y a su hija Ivanka, formar parte de consejos de otras organizaciones benéficas de Nueva York.
Los supuestos abusos incluyeron aportar dinero a una campaña política de Florida; promocionar los hoteles de la marca Trump; resolver una demanda en 2007 entre la ciudad de Palm Beach y el resort Mar-a-Lago de Trump; solucionar otra demanda de un golfista que participó en un evento de caridad patrocinado por Trump en 2012 y cubrir gastos personales, incluida la compra de un retrato que se exhibió en uno de sus clubes de golf.
La demanda civil es uno de los muchos problemas legales que enfrenta Trump, cuya campaña electoral está siendo investigada por el fiscal especial Robert Mueller por una presunta colusión con Rusia.
Ayer, el juez Emmet Sullivan criticó con dureza a Michael Flynn, ex asesor de seguridad nacional de Trump, por mentirle a agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI) en la investigación sobre la interferencia rusa en la elección de 2016, y retrasó la sentencia hasta que el acusado termine de colaborar con los fiscales. Las partes acordaron fijar una nueva audiencia para el próximo 13 de marzo, cuando se evaluará la situación.
“Probablemente usted vendió a su país”, dijo el juez en alusión a los supuestos hechos cometidos por el ex asesor. Tanto la fiscalía como el acusado habían solicitado que la condena por haber mentido al FBI no implicara una pena de prisión, ya que —según los investigadores— la cooperación de Flynn ha sido “significativa” para las pesquisas.
Flynn se reconoció culpable ante una corte federal de haber mentido a agentes del FBI sobre sus conversaciones con el entonces embajador de Rusia, Serguei Kislyak, al haber negado que hubiera discutido con éste, en diciembre de 2016, el tema de las sanciones contra Rusia. Además de los hechos en relación a Rusia, Flynn confesó haber participado en actividades de cabildeo en favor de Turquía de forma irregular.