Un tiroteo ayer en Orange, California, dejó al menos cuatro muertos, incluido un niño, y dos heridos en un complejo comercial, de acuerdo con la policía.
“La situación se ha estabilizado y no hay ninguna amenaza para el público”, informó la dependencia.
Los oficiales respondieron a los informes de un tiroteo alrededor de las 17:30 horas y llegaron mientras se realizaban los disparos, dijo el Departamento de Policía de Orange. Los oficiales fueron atacados y respondieron al fuego, informó la teniente Jennifer Amat, portavoz policial de Orange, según Los Angeles Times.
El tirador fue trasladado a un hospital en estado desconocido, dijo Amat.
El tiroteo atrajo una fuerte presencia policial con más de una docena de coches de policía y un vehículo SWAT, incluidos camiones de bomberos. La congresista demócrata por California, Katie Porter, emitió una declaración señalando:“Me entristecen profundamente los informes de un tiroteo masivo en el condado de Orange, y sigo pensando en las víctimas y sus seres queridos mientras seguimos aprendiendo más. Mi equipo y yo continuaremos monitoreando la situación de cerca”.
El incidente se produce semanas después de que ocho personas murieran en un tiroteo masivo en un spa de Atlanta. Seis de las víctimas eran asiáticas.
Seis días después, un hombre abrió fuego en un supermercado en Boulder, Colorado, matando a 10 personas. Estos tiroteos masivos han provocado nuevos pedidos de medidas de control de armas.