La designación del gobernador de Minnesota, Tim Walz, como candidato demócrata a la Vicepresidencia estadounidense, no ha pasado desapercibida en China, país en el que el político pasó un año como profesor en 1989, ni tampoco por los republicanos, que aseguran que el gobierno de Beijing está feliz con el nombramiento. Pero, ¿es Walz prochino? Su historial dice lo contrario.
Walz pasó un año enseñando inglés e historia estadounidense en una escuela secundaria de la ciudad de Foshan, en la provincia suroriental de Cantón, en 1989, año en que ocurrió la masacre de la plaza de Tiananmen. El gobernador de Minnesota recuerda aquella como “una de las mejores cosas” que ha hecho en su vida.
Luego, regresó a China para pasar allí su luna de miel. Más tarde creó una empresa con su esposa Gwen para organizar viajes educativos a China todos los veranos. La empresa duró más de una década y, según sus propias estimaciones, el Sr. Walz regresó al país unas 30 veces.
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Sin embargo, quizá precisamente por haber estado en Beijing durante la violenta represión en Tinanmen, su postura respecto al gobierno chino ha sido muy crítica, como demostró cuando fue miembro de la Cámara de Representantes.
En esa época (2007-2019), se reunió con el Dalai Lama y con el activista por la democracia Joshua Wong (antes de ser detenido), a quienes Beijing considera como enemigos. También invitó al líder del gobierno tibetano en el exilio, Lobsang Sangay, a su oficina del Congreso para reunirse con un grupo de estudiantes de secundaria de Minnesota.
Estuvo también más de 10 años en la Comisión Ejecutiva del Congreso sobre China, dedicada a examinar los abusos del gobierno chino contra los derechos humanos.
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En 2016, el mismo año en que se reunió con el Dalai Lama, también invitó al entonces líder del
Su nominación como compañero de fórmula de Kamala Harris no pasó desapercibida en China. Aunque el gobierno no se ha pronunciado, los ciudadanos chinos sí, en sus redes sociales.
"Un rival que nos conoce tanto es peligroso", comentó un usuario sobre uno de los 'trending topcis' de hoy en la red social Weibo, equivalente a X, mientras que otro apuntó a que "muchos de los extranjeros que vivían aquel entonces en nuestro país eran espías o maltrataban a China".
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"Lo cierto es que estuvo en una China muy diferente a la de ahora", dijo otro, que expresó en tono escéptico su deseo de que la experiencia de Walz sobre el terreno "sirva al menos para promover los intercambios culturales" entre los dos países.
Otro lamentó que "gane quien gane en noviembre, no va a ser amable con China".
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