Quito.— El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, afirmó ayer que su gobierno está ganando la “batalla” que le declaró al crimen organizado, a cuyas bandas catalogó como terroristas y actores beligerantes no estatales tras una oleada de violencia.
“Teníamos todo en contra, pero estamos ganando esta batalla”, señaló Noboa en un acto donde entregó nuevo equipamiento a la Policía Nacional y en el que reseñó que tras declarar el “conflicto armado interno” la semana pasada las muertes violentas han pasado de 38 a seis por día.
El mandatario aseguró que no es tiempo de indecisiones y ambigüedades porque se trata de un “momento histórico donde el país estuvo a un paso de irse de nuestras manos, pero la policía y las fuerzas armadas demostraron estar a la altura de estos retos.
“Momento histórico porque el pueblo sufre por la violencia, por la extorsión, por la droga que envenena y mata a nuestros hijos y daña el futuro de la patria”, anotó.
El gobernante aseguró que Ecuador venía debilitado por las distintas crisis políticas, la pandemia, el populismo y “la irresponsabilidad política”.
“La política tradicional prefirió siempre mirar a un lado en vez de mirar al frente y responder con firmeza y claridad, apoyando la lucha que llevan adelante la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas”, subrayó.
“Hemos pasado de años de estar a la defensiva y ahora estamos a la ofensiva. Hoy tenemos claro que tenemos un enemigo en común: las mafias narcoterroristas, que nos pretenden debilitar como nación”, añadió.
Noboa destacó el éxito de las fuerzas del orden para someter al grupo armado que el 9 de enero irrumpió en los estudios del canal TC Televisión en una emisión en vivo y secuestró a sus trabajadores varias horas.
“Sometieron a los secuestradores de una forma profesional evitando una tragedia que podía haber hundido al país en la desesperación”, dijo Noboa, que también resaltó la liberación al menos de 170 rehenes en una serie de motines en cárceles.
El balance del gobierno de Ecuador publicado ayer sobre las operaciones policiales y militares en el territorio nacional durante los primeros 14 días de la declaración de un “conflicto armado interno” contra el crimen organizado, detalla que 3 mil 52 personas han sido detenidas, de las cuales 158 fueron arrestadas por presunto terrorismo.
Entre el 9 y el 22 de enero, bajo este nuevo escenario donde 22 bandas criminales han sido consideradas grupos terroristas y actores beligerantes no estatales, las autoridades ecuatorianas afirman haber abatido a cinco presuntos miembros de estos grupos, mientras que dos policías fueron asesinados y otros 11 liberados de distintos secuestros ejecutados aparentemente por estas mafias.