Nueva Delhi.— India, enfrentada a una dramática crisis sanitaria, superó ayer los 200 mil muertos por el Covid-19, cuya variante local se detectó ya en al menos 17 países, mientras que Europa llegó a más de 50 millones de infectados desde que inició la pandemia.
India, el cuarto país con más fallecidos por coronavirus tras Estados Unidos, Brasil y México, superó el umbral de 200 mil decesos tras registrar más de 3 mil fallecidos en 24 horas por primera vez, según datos oficiales.
La nación de mil 300 millones de habitantes, la segunda más poblada después de China, también registró en un sólo día unos 360 mil contagios. Los crematorios no descansan. La explosión de casos se atribuye a la variante india y a las masivas manifestaciones políticas y religiosas de las últimas semanas. Reino Unido envió a India un primer cargamento de 100 ventiladores y 95 concentradores de oxígeno. Francia, Canadá, Italia, Estados Unidos, Suiza y Rusia también darán ayuda de emergencia.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo desconocer si el mayor índice de mortalidad en India se debe a una variante más agresiva, a la situación del sistema sanitario por la explosión de casos o a ambos.
La OMS dijo que sólo India representa 38% de todos los contagios de la última semana. La variante india fue “detectada con una frecuencia creciente” en los nuevos casos de la nación, señaló. Se cree que la variante B1617 contiene mutaciones de otras dos. La OMS indicó que la B1617 “tiene una tasa de crecimiento más alta que otras variantes que circulan en India, lo que apunta a un aumento potencial de la transmisibilidad”.
Aunque las “pruebas” continúan, el director del laboratorio BioNTech, Ugur Sahin, dijo “confiar” en la eficacia contra esta variante de su sustancia desarrollada junto a Pfizer.
Mientras tanto, continúa en el mundo la búsqueda de más inmunizante. Reino Unido anunció que comprará 60 millones de nuevas dosis de la vacuna Pfizer/BioNtech, en tanto que Turquía pidió 60 millones del fármaco ruso Sputnik. Según un informe publicado ayer, la Unión Europea (UE) estima que Rusia y China han orquestado campañas de “denigración” para socavar la confianza en las vacunas que aprobó su regulador de medicamentos, la Pfizer-BioNTech, AstraZenca, Moderna y Johnson & Johnson.
Impacto en entrega de dosis
Mientras, la OPS, oficina de las Américas de la OMS, destacó el impacto de la nueva ola de Covid en India en la entrega de vacunas del mecanismo Covax, que provee de dosis a Latinoamérica y el Caribe. “Es un impacto bastante importante”, dijo en rueda de prensa Jarbas Barbosa, subdirector de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), señalando a Bolivia, Haití y Nicaragua como afectados.
Antes del fuerte repunte de casos y muertes, India exportaba a través del Covax decenas de millones de dosis anti-Covid del laboratorio anglo-sueco AstraZeneca fabricadas en el país por el Serum Institute. Pero con la crisis, Nueva Delhi congeló las exportaciones de vacunas, incluyendo las del Covax, para priorizar el suministro interno.
La OPS, que facilita la adquisición de vacunas del Covax en el continente americano, señaló su preocupación al respecto. La OPS también ha mantenido conversaciones con los gobiernos de países desarrollados y les ha pedido que donen a Latinoamérica y el Caribe las vacunas que les sobran. “Nuestra región aún se encuentra bajo las garras de esta pandemia”, dijo Carissa Etienne, directora de la OPS, “no sólo no se ha terminado, se está acelerando”, agregó, al apuntar que en varios países sudamericanos los primeros cuatro meses del año fueron peores que 2020.