BUENOS AIRES.- Los centros de votación abrieron este domingo en Argentina en unas históricas elecciones presidenciales que pueden generar un cambio de ciclo político.
Decenas de argentinos se acercaban a las urnas a primera hora de la mañana, en una jornada gris y lluviosa marcada por la ansiedad y la incertidumbre. El presidente Alberto Fernández, que no se presenta a la contienda, era uno de los primeros en ejercer su voto .
El ultraderechista Javier Milei, de la Libertad Avanza, lidera la mayoría de las encuestas. Lo sigue de cerca el ministro de Economía Sergio Massa, de la peronista Unión por la Patria, y en un tercer lugar se encuentra Patricia Bullrich, de la coalición centroderechista Juntos por el Cambio.
Milei, de 52 años y líder de La Libertad Avanza, es favorito en la mayoría de las encuestas con su discurso en contra de la clase política tradicional a la que tacha de “casta” de privilegiados y ha sabido empatizar con amplios sectores populares que tienen su poder de compra pulverizado y que han sido testigos de constantes escándalos de corrupción protagonizados por funcionarios públicos.
Si el economista de agresivo discurso se impone en los comicios, relegará en el escenario político al peronismo, que ha retenido mayoritariamente el poder en los últimos 20 años, y a esa coalición de centroderecha que gobernó entre 2015 y 2019.
“Es un día importante en que los argentinos deciden su futuro”, manifestó el presidente Alberto Fernández después de ejercer su voto. Invitó a los ciudadanos a participar en la elección y afirmó que a partir del 10 de diciembre de este año, cuando ceda su mandato, vivirá como un “ciudadano”.
Fernández, con mala imagen en las encuestas de opinión, desistió de buscar la reelección y la vicepresidenta y exmandataria Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), que enfrenta distintas causas por presunta corrupción, tampoco se postuló.
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“Estamos todos sin expectativa ojalá que sea lo mejor para la Argentina”, dijo a The Associated Press Sabrina Rodríguez, de 36 años, estudiante que se declaraba “ansiosa” por lo que pueda suceder hoy y deseaba “un cambio de ciclo”.
María Rey, administrativa de 38 años se declaraba “esperanzada”, lo mismo que su acompañante, Alejandro Casado, un militar, de 48 años, “esperamos que quien sea que gane haga las cosas mejores para el país”, e instaba a mantener la tranquilidad.
“Que gane cualquiera”, salvo el actual gobierno, manifestaba Julio Caro, de 85 años y retirado, quién dijo dudar entre Milei y Bullrich y decidirse por esta última.
A diferencia de otras elecciones “estas generan bastante incertidumbre”, señaló Guillermo Castillo, periodista de 47 años que acudía a votar antes de ir a trabajar. “Por más que venga alguien con ideas mesiánicas y que quiera instaurar locuras creo que la sociedad misma y el Congreso y parlamento no lo va a dejar”.
Los argentinos votarán en un contexto económico difícil, con una inflación anual de algo más de 138% y una pobreza que afecta a 40.1% de la población de unos 46 millones de habitantes.
La acelerada suba de precios y la inseguridad están al tope de las preocupaciones de los habitantes del país sudamericano en las encuestas de opinión.
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