Estocolmo.— El gobierno de Suecia reabrió ayer la investigación sobre la presunta violación cometida por Julian Assange, fundador de WikiLeaks, y pedirá a Reino Unido su extradición, aplazando así los intentos de Estados Unidos de llevarlo ante sus tribunales por haber filtrado documentos secretos en la web.
La vicefiscal Eva-Marie Persson dijo en una conferencia de prensa que seguirá con la averiguación preliminar abandonada en 2017, debido a que Assange se encontraba refugiado en la embajada de Ecuador en Londres.
El fundador de WikiLeaks fue detenido el mes pasado en Reino Unido, tras pasar cerca de siete años dentro de la legislación diplomática.
A raíz de su arresto, el gobierno estadounidense busca su extradición por cargos de conspiración, al haber revelado información confidencial, incluidas evaluaciones de líderes extranjeros, conflictos bélicos y asuntos de seguridad nacional.
Persson dijo que pedirá la aprehensión en ausencia de Assange, en relación con la acusación de violación y que emitirá una orden de arresto. El australiano, de 47 años, se halla preso en Londres y condenado a 50 semanas por violar la libertad condicional cuando se refugió en 2012.
Ecuador, en tanto, autorizó incautar en su embajada en Inglaterra el material informático utilizado por Assange durante su estadía para entregarlo a las autoridades estadounidenses, afirmó la defensa del fundador de WikiLeaks, según un documento atribuido a la justicia ecuatoriana, y fechado el 8 de mayo en Quito. El abogado de Assange en Ecuador, Carlos Poveda, presentó un oficio de oposición para pedir que se suspenda la diligencia.
