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Phoenix
.- La visita a una tienda, un partido de beisbol, un bebé columpiándose de la rama de un árbol. Millones de personas han visto a extraños hacer estas actividades cotidianas en internet.
Los videoblogs familiares son una industria multimillonaria que ha permitido que algunos padres abandonen sus empleos y estén con sus hijos todo el tiempo, documentando su vida diaria y publicando las imágenes para que todos las vean. Pero la popularidad de los videos, que atraen a patrocinadores corporativos, tiene un precio para los niños.
Una mujer de Arizona fue acusada el martes de abusar de sus hijos quienes aparecían en videos de YouTube vistos millones de veces. A la mujer se le presentaron cargos, entre otras cosas, por usar gas pimienta para castigarlos si actuaban mal durante la filmación.
Aunque el caso es extremo, ha creado preocupación sobre la protección legal para los menores y disyuntivas éticas acerca de los niños que aparecen en videos que generan dinero.
"Desde una perspectiva de desarrollo, tienes un papel doble como padre, eres jefe y padre, y eso es muy confuso para un niño, especialmente para los niños más pequeños que quieren complacer a sus padres”, dijo Yalda T. Uhls , fundadora y directora ejecutiva del Centro para Maestros y Narradores de la Universidad de California en Los Ángeles , especializado en contenidos de medios para niños.
“Aunque pueda parecer ante la cámara que los niños están jugando, están trabajando”, dijo Uhls .
Las leyes laborales que protegen a los niños en los sets de películas y televisión no se hacen cumplir en internet. Las leyes estatales señalan cuánto pueden trabajar los niños actores contratados por estudios, cuánto deben asistir a la escuela y dónde se debe guardar su dinero. En los videoblogs los padres son los únicos reguladores.
Las plataformas de redes sociales como YouTube no intervienen con los niños que aparecen en los videos en internet, que pueden generarle a las familias cientos de miles de dólares al año. Los videos tienen comerciales y a eso se suman los contratos que ofrecen las empresas para que los canales populares muestren sus productos.
Para algunas familias es un sueño ganarse la vida transmitiendo precisamente sus vidas, ya sea yendo a un entrenamiento de futbol o mostrando bromas hechas con guión. Pero no siempre es beneficioso para los niños.
“El internet es como el Viejo Oeste”, dijo Paul Petersen , fundador de A Minor Consideration , una organización sin fines de lucro que aboga por los niños actores. “Los niños están siendo explotados, todos lo podemos ver, justo frente a ti, y nadie está haciendo nada”.
, la propietaria de YouTube , dijo que trabaja estrechamente con expertos para proteger a las familias proporcionándoles materiales educativos.
YouTube
deja al criterio de los creadores de contenido que se apliquen las reglas, dijo Google . Señaló que trabaja con las familias que tienen el mayor número de suscriptores, pero esencialmente reconoce que el sitio tiene demasiado contenido para rastrearlo.
El caso de Arizona dejó en claro que el abuso puede ocurrir.
De acuerdo con la policía, Machelle Hobson de 48 años, usó gas pimienta para disciplinar a sus cinco hijos adoptivos y los encerró en un armario sin comida, agua o acceso a un baño por días. La policía dijo que los niños eran castigados si no hacían lo que se les indicaba en el canal de YouTube de la familia, el que tenía millones de vistas gracias a sus 36 videos.
YouTube
cerró el canal y publico un mensaje en el que señalaba que el contenido violaba sus normas.
agv