El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos , congeló este lunes los diálogos de paz con el ELN en Quito, tras los atentados de esa guerrilla que dejaron siete policías muertos y decenas de heridos el fin de semana.
"He tomado la decisión de suspender la instalación del quinto ciclo de conversaciones que estaba prevista para los próximos días, hasta que no vea coherencia por parte del ELN entre sus palabras y sus acciones", afirmó Santos en una declaración pública desde la localidad de La Palma (centro).
El gobierno y el ELN, la mayor guerrilla activa de Colombia conformada por unos 2.000 combatientes, iniciaron una negociación de paz en Ecuador en febrero del año pasado, en un intento por acabar por completo con el conflicto interno de más de medio siglo que ha dejado 220.000 muertos.
El diálogo de paz enfrenta una crisis desde el 10 de enero, cuando expiró un cese bilateral al fuego de más de tres meses y el grupo rebelde reactivó sus ataques contra las Fuerzas Armadas y la infraestructura económica del país.
El fin de semana, el ELN cometió tres ataques en Barranquilla y otras poblaciones del norte de Colombia, en los que murieron siete policías y 47 resultaron heridos.