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El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, levantó este martes, tras una reunión extraordinaria de su gobierno y más de cinco horas, la ley marcial que había declarado horas antes, al tiempo que aseguró que las tropas que se ocupaban de garantizarla ya se habían retirado a sus cuarteles.
Los opositores, incluido el Partido Demócratico, intensificaron su nivel de ofensiva contra el presidente al decir que levantar la ley marcial por sí solo no es suficiente e incluso llegaron a sugerir que se lleve a cabo un procedimiento de destitución inmediato.
Park Chan-dae, una figura importante del Partido Demócratico, ha pedido al presidente que renuncie. Según CNN, Park dijo que Yoon debe “dimitir inmediatamente” y “no puede evitar el cargo de traición” por su declaración de la ley marcial.
“Ha dejado a todo el pueblo en estado de shock”, dijo Cho Kuk. “El presidente es un ser peligroso… que amenaza la democracia y la Constitución”.
Se comprometió a destituir a Yoon reuniendo los votos de otros partidos.
La Coalición de la Asamblea Nacional para el juicio político contra Yoon Seok-yeol, lanzada el mes pasado por unos 40 miembros del Partido Demócrata, el Partido Innovación de la Patria, el Partido Progresista, el Partido de la Renta Básica y el Partido Socialdemócrata, celebró una conferencia de prensa en la Asamblea Nacional y argumentó: “Acusemos a Yoon Seok-yeol, el líder de la rebelión que manipuló los asuntos estatales”.
Hwang Un-ha, líder parlamentario y copresidente del grupo, dijo: “El presidente movilizó al ejército y cometió un crimen que en realidad equivalía a traición” y añadió: “Porque se ha confirmado que él no puede estar en el cargo ni por un momento, debemos aprobar urgentemente una resolución sobre el impeachment (del presidente)”, reportó la agencia de noticias Yonhap.
Continuó: “Cada partido discutirá y propondrá rápidamente un proyecto de ley de impeachment al final de hoy. Dado que debe aprobarse dentro de las 72 horas posteriores a las 24 horas posteriores a la propuesta del proyecto de ley de impeachment, la Asamblea Nacional debe concentrarse en aprobar el proyecto de ley lo antes posible, posible y suspender inmediatamente al presidente de sus funciones”, enfatizó.
El representante Jeong Seong-ho, conocido como líder de la facción pro-Myung (pro-Lee Jae-myung), dijo en Facebook: “El presidente Yoon debe dimitir voluntariamente y declararse culpable hoy”, dijo, indicó la agencia.
También el líder del partido de Yoon Suk Yeol instó al presidente de Corea del Sur a explicar su “trágica” decisión de introducir la ley marcial y pidió el despido del ministro de Defensa del país.
“Como partido gobernante, sentimos profundamente pena por el público”, dijo el líder del Partido del Poder del Pueblo, Han Dong-hoon, en una declaración a los periodistas el miércoles por la mañana, hora local.
Corea del Sur: Enfrentamiento entre el presidente y Congreso por el presupuesto
La Constitución de Corea del Sur estipula que la ley marcial debe levantarse si una mayoría del Parlamento lo pide.
Yoon ganó las últimas elecciones en 2022 por estrecho margen frente al jefe de la oposición.
El mandatario recurrió a esta maniobra debido al enfrentamiento de su partido y el principal partido opositor, el Partido Democrático, sobre el proyecto de presupuesto para el próximo año.
Yoon también ha rechazado los pedidos de investigaciones independientes sobre los escándalos que involucran a su esposa y altos funcionarios, lo que le ha valido rápidas y enérgicas reprimendas de sus rivales políticos.
Los diputados de la oposición, que tienen mayoría en el hemiciclo de 300 escaños, aprobaron la semana pasada un plan presupuestario significativamente reducido.
Yoon acusó a los legisladores de la oposición de recortar “todos los presupuestos clave para las funciones fundamentales del país, como la lucha contra los delitos relacionados con las drogas y el mantenimiento de la seguridad pública”.
También los acusó de ser “fuerzas antiestatales que intentan derrocar el régimen”.
Vladimir Tikhonov, profesor de estudios coreanos en la Universidad de Oslo, afirmó que la medida de Yoon de imponer la ley marcial es “un intento de dar marcha atrás a la historia”, en referencia a la dictadura que terminó a finales de la década de 1980.
“No creo que la sociedad civil surcoreana pueda seguir reconociendo a Yoon como presidente legítimo”, declaró a AFP.
La oposición también ha intentado aprobar mociones para destituir a tres fiscales de alto rango, incluido el jefe de la Fiscalía del Distrito Central de Seúl, en lo que los conservadores han llamado una venganza contra sus investigaciones criminales sobre Lee, quien ha sido visto como el favorito para las próximas elecciones presidenciales en 2027 en las encuestas de opinión.
“No tenía nada que perder”
Sydney Seiler, presidente coreano del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, argumentó que la medida era simbólica para que Yoon expresara su frustración con el parlamento controlado por la oposición.
“No tenía nada que perder”, dijo Seiler, comparando la jugada de Yoon con el pase Hail Mary en el futbol americano, donde esperaba tener una pequeña posibilidad de éxito.
Ahora Yoon enfrenta un posible impeachment, un escenario que también era posible antes de que tomara la audaz decisión, dijo Seiler.
Natalia Slavney, analista de investigación del sitio web 38 North del Centro Stimson que se centra en los asuntos coreanos, dijo que la imposición de la ley marcial por parte de Yoon fue “un grave retroceso de la democracia” que siguió a una “preocupante tendencia de abuso” desde que asumió el cargo en 2022.
Corea del Sur “tiene una sólida historia de pluralismo político y no es ajena a las protestas masivas y los juicios políticos rápidos”, dijo Slavney, citando el ejemplo de la expresidenta Park Geun-hye, la primera presidenta mujer del país, quien fue destituida de su cargo y encarcelada por soborno y otros delitos en 2017 .
mgm
