Lima.— Trece de los 14 países que conforman el Grupo de Lima, entre ellos Brasil, México y Argentina, repudiaron ayer la represión a opositores en Venezuela y reclamaron una investigación transparente sobre el supuesto atentado contra el presidente Nicolás Maduro, según comunicado de la cancillería peruana.
Los firmantes, que pregonan una solución pacífica a la crisis venezolana, también “expresan su profunda inquietud por utilizar instituciones del Estado para perseguir a opositores, lo que evidencia una vez más la ruptura del orden democrático y el quebrantamiento de la Constitución de ese país, contraria a la voluntad del pueblo venezolano”.
El comunicado exhorta al presidente Maduro a “que se conduzca una investigación independiente, exhaustiva y transparente, sobre el evento que tuvo lugar el 4 de agosto para esclarecer los hechos de manera imparcial con respeto del Estado de derecho y los derechos humanos”. Igualmente, “repudian cualquier intento de manipulación que se haga del incidente para perseguir y reprimir a la disidencia política”.
El comunicado “condena y rechaza firmemente la violación del debido proceso penal durante la detención arbitraria e ilegal del diputado Juan Carlos Requesens, así como de la orden de captura contra el diputado Julio Borges”.
El gobierno venezolano vinculó a ambos con el supuesto atentado con drones del 4 de agosto contra Maduro. El viernes, Requesens fue trasladado a tribunales, pero su audiencia fue diferida para el lunes.
La pesquisa por el ataque con drones cargados de explosivos que hace una semana detonaron cerca de un acto militar en el que estaba Maduro —quien denunció un “magnicidio frustrado”— dio un giro luego de que Requesens admitiera bajo arresto haber tenido contacto con uno de los supuestos implicados.
El diputado dijo en el video que ayudó a Juan Monasterios, ex militar detenido por el ataque, a ingresar a Venezuela desde Colombia. Monasterios testificó haber contribuido a que los drones entraran al país.
Sin embargo, los opositores aseguraron que Requesens fue amenazado o drogado para dar ese testimonio. Unas 300 personas protestaron ayer en una plaza en Caracas exigiendo la liberación de Requesens.
A la manifestación, convocada por la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), asistieron la hermana del parlamentario, Rafaela Requesens, y su padre, Gregorio Requesens, así como diputados del Parlamento de mayoría opositora. Los familiares del legislador denunciaron que ni ellos ni sus abogados han podido verlo. “Mi hijo está desaparecido”, afirmó el señor Gregorio.
“Aunque hayan secuestrado a Juan, no sólo nosotros, sino todo el pueblo venezolano exige su libertad. Maduro, sabes que te queda poco”, expresó Rafaela ante los manifestantes, que estallaron en aplausos.
Varios hombres se quitaron la ropa en la protesta y se quedaron en calzoncillos, justo como aparece Requesens en el video, para denunciar la “humillación” que dijeron sufrió el diputado, y pidieron que se le respete el debido proceso.
“Decidimos desnudarnos porque si humillan a uno, nos humillan a todos; si meten preso a uno, nos van a tener que meter presos a todos”, dijo Daniel Santos, estudiante de 19 años.