El Centro de Control de Enfermedades (NCDC) de Nigeria informó que al menos 41 personas han muerto en el país africano por una nueva epidemia de fiebre de Lassa (una enfermedad hemorrágica aguda) declarada a comienzos de enero de este año.
En un comunicado, el NCDC indicó que, hasta el 26 de enero, se han registrado 258 casos confirmados en 19 estados de Nigeria, el país más poblado de África, con casi 200 millones de habitantes.
Los estados más afectados por el brote son Edo (sur), Ondo (suroeste) y Ebonyi (sureste).
Aquí te decimos algunos datos importantes de la fiebre de Lassa.
Según la Organización Mundial de la Salud , la fiebre de Lassa es una enfermedad hemorrágica viral aguda de una a cuatro semana de duración.
Esa fiebre toma su nombre de la localidad nigeriana de Lassa, en el estado norteño de Borno, donde se descubrió por primera vez en 1969.
El virus de Lassa , que normalmente portan y transmiten los roedores, es una enfermedad endémica del África occidental, donde se registran de 300 mil a 500 mil casos al año.
La fiebre tiene un período de incubación de entre 6 y 21 días.
Los síntomas incluyen debilidad, dolor de cabeza, vómitos y dolores musculares y la tasa de mortalidad es de alrededor del 1%, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Según la OMS , en los casos graves de fiebre de Lassa puede aparecer tumefacción facial, derrames pulmonares, hemorragias bucales, nasales, vaginales y gastrointestinales e hipotensión.
“La fiebre de Lassa es una enfermedad zoonótica, es decir, que una persona se infecta por contacto con animales infectados. Las ratas infectadas por el virus de Lassa no enferman, pero eliminan el virus en la orina y las heces”, indicó la OMS.
El contagio puede producirse entre personas, incluso en entornos hospitalarios que carezcan de medidas de control de infecciones. La OMS alertó que también puede haber transmisión en el laboratorio.
La Organización Mundial de la Salud señaló que la ribavirina, un antiviral, parece ser eficaz en el tratamiento de la fiebre de Lassa si se administra al principio de la enfermedad.
Sin embargo, no hay vacuna que proteja contra esta enfermedad.
El año pasado, el país ya sufrió otra epidemia de fiebre de Lassa que causó más de 160 muertos; y en 2018 la enfermedad provocó el fallecimiento de 171 personas.
lsm