Con apenas 38 días en el cargo, la primera ministra británica, Liz Truss , está en el ojo del huracán, y con políticos pidiendo su cabeza.
Este viernes, Truss optó por salvarse a ella misma y sacrificó a su ministro de Finanzas y gran aliado, Kwasi Kwarteng , tras la tormenta que desató la propuesta de una masiva bajada de impuestos que Kwarteng presentó el 23 de septiembre.
Acorralada por los mercados y por su propio Partido Conservador, Truss puso en bandeja de plata la cabeza de Kwarteng, a quien reemplazó con Jeremy Hunt , un hombre que representa justo al establishment contra el que Truss dijo que lucharía.
El nerviosismo de Truss por su futuro se hizo todavía más evidente en la brevísima conferencia de prensa que dio para anunciar que no sólo se desecha el recorte de impuestos, sino que habrá subida del impuesto de sociedades del 19 % al 25 %, un plan que el anterior Ejecutivo de Boris Johnson había anunciado y que ella se había comprometido a anular.
La subida permitirá recaudar 20 mil 700 millones de euros , que utilizarán para enjugar la deuda a medio plazo.
Sin embargo, los medios no han dejado escapar las turbulencias que ha desatado Truss.
Primero fue el prestigiado The Economist, que en una columna publicada hace unos días: “The Iceberg Lady” (La dama Iceberg), describió a Truss como alguien que tiene “ la vida útil de una lechuga ”.
El sensacionalista Daily Star aprovechó el momento, que lanzó un reto a la audiencia: “¿Qué va a caducar antes, Liz Truss como primera ministra, o una lechuga?
Lee también: Libra cae y la deuda británica se encarece tras los anuncios de Truss
El medio tuiteó una transmisión en vivo, donde coloca un retrato de Truss y una lechuga, y pretende ver, día con día, qué aguanta más.
Hasta la noche de este viernes, el tuit tenía más de 10 mil me gusta y se había convertido en uno de los tuits más virales en Reino Unido.
Suscríbete aquí para recibir directo en tu correo nuestras newsletters sobre noticias del día, opinión, Qatar 2022 y muchas opciones más.
vare