Más Información
Denuncian agresión de presuntos militares contra trabajadores en Tamaulipas; una de las víctimas falleció, tenía huellas de tortura
Diputados avalan súper secretaría de García Harfuch; SSPC investigará delitos y coordinará inteligencia a nivel nacional
Elección judicial: Aspirantes a cargos comparten carta de motivos y hasta currículum; “Justicia no debe ser inaccesible”, afirman
Yasmín Esquivel defiende la reforma judicial en Con los de Casa; alejado de la realidad pensar que es una venganza política, afirma
México hablará con Trump sobre el T-MEC en febrero; no es obligación del país tener órganos autónomos, afirma Ebrard
Con prórroga o sin ella, elección judicial va, asegura Taddei; afirma que presupuesto de 13 mmdp no es ninguna “ocurrencia”
Así fingió “El Guacho” su muerte para vivir en Estados Unidos; su esposa es hija de “El Mencho”, líder del CJNG
Decenas de activistas antidiscriminación se manifestaron el sábado delante del hotel Dorchester de Londres, propiedad de Brunéi , un pequeño país del sudeste asiático que instauró la pena de muerte por lapidación para castigar las relaciones homosexuales y el adulterio.
Encabezadas por el activista de derechos humanos Peter Tatchell, casi un centenar de personas se concentraron fuera del lujoso hotel, muchos de ellos con banderas arcoíris y pancartas contra la homofobia .
El pequeño Estado rico en hidrocarburos situado en la isla de Borneo y dirigido con mano de hierro por el sultán Hassanal Bolkiah se convirtió el pasado miércoles en el primer país del sudeste asiático que aplica un código penal basado en la sharía más estricta, siguiendo el ejemplo de Arabia Saudita .
El nuevo código fue criticado por la ONU y por numerosos gobiernos y oenegés, y varias figuras del mundo del espectáculo como George Clooney y Elton John urgieron a boicotear los hoteles de lujo propiedad del sultán de Brunéi.
Tatchell afirmó que si Brunéi no revoca la ley, el gobierno británico, que tiene una guarnición militar allí, tendrá que cortar vínculos con su antiguo protectorado.
"Si el sultán no quiere atender a razones ni a la compasión, creemos que el gobierno británico tendría que cortar todos los vínculos diplomáticos, económicos y militares con el régimen", dijo durante la protesta.
El gobierno británico describió el jueves el nuevo código, que también ordena la amputación de una mano o un pie por robo, como un "paso atrás" para Brunéi.