Tras la jornada que sacó a las calles a millones de personas en Santiago de Chile , el presidente Sebastián Piñera pidió la renuncia a todos sus ministros para formar un nuevo gabinete.
En entrevista con EL UNIVERSAL, María Elvira Ríos , investigadora de postdoctorado Fondecyt de la Universidad Católica de Chile y asistentes a la megamanifestación de este viernes, calificó esa protesta como "una especie de fiesta, se veía gente manifestando y celebrando. Se logró el reencuentro social, la gente se está mirando, estamos dándonos cuenta de la individualidad en la que vivíamos".
Afirmó que el "presidente debería cambiar su gabinete" y añadió que al gobernante "le falta humildad"; aunque ha presentado reformas "está en una situación de desesperación".
"Él junto con su gabinete han intentado lograr satisfacer lo que solicita la sociedad. Hay propuestas interesantes, pero no tienen un trasfondo real. Algunas medidas pueden ser una especie de tapar la situación por el momento, pero que no estarían curando la situación esencial (...) Las reformas pueden ser buenas, pero no hay credibilidad", apuntó.
Enfatizó que la nación debe liberarse de ideologías, "que generan dualidades".
También aseguró que lo que debe hacer el mandatario es tener la conciencia "de que hay que liberarse de cuestiones que separan y dividen".
Sin embargo, reconoció que eso es difícil por los orígenes de Piñera , quien "siempre ha sido de derecha (...) Es un empresario. Es lo contrario de un líder que necesitamos. No se trata de líderes, sino de fortalecer mesas de trabajo y comités y lograr que senadores y diputados empiecen a trabajar como servidores públicos".
La investigadora exigió "humildad, un cambio de gabinete, cambio de ministros, sobre todo del Interior ( Andrés Chadwick ), y un primer paso sería modificar la forma en la que se gobierna y dialoga con la sociedad, y empezar a disminuir todos los procesos de venta (...) A Chile sólo le falta que venda el aire. También es necesario solucionar los problemas con el pueblo mapuche. Además, se deben entender las necesidades de la sociedad chilena. Es necesario dialogar y convivir con respeto".
" Santiago es una de las ciudades más caras para vivir", agregó.
Sobre las protestas, recordó que iniciaron por el alza en las tarifas del Metro , pero se fueron extendiendo por la desigualdad social a la que hay que sumar los "problemas de pensiones y de salario, que no alcanza para vivir en ciudades como Santiago , una de las más caras".
Acerca de las primeras quemas en la infraestructura, de estaciones del Metro y de otros lugares, indicó que "son movimientos violentos que ya venían estructurándose, que existen en Chile y en otras partes del mundo".
Tras esas acciones inició el toque de queda y el gobierno declaró el estado de emergencia, del que se anunció su levantamiento este sábado. La investigadora afirmó que tener a los "militares en las calles ocasiona violencia visual, y esto ha generado muertes, torturas por parte de carabineros y militares y violencia de estos grupos que deciden quemar farmacias, supermercados".
Respecto a las denuncias de violencia, dijo que "los militares y carabineros no pueden actuar de forma violenta, constitucionalmente hablando"; no obstante, sí ha ocurrido, al igual que otras formas de violencia contra las mujeres.
Recordó: "Se menciona de 12 violaciones a mujeres y muerte (...) Se ha ejercido muy mal la capacidad de control. Se trata de controlar no de reprimir".