São Paulo. La Justicia Militar de Brasil decretó este jueves prisión preventiva para el policía que arrojó por un puente a un hombre durante un control en la ciudad de São Paulo, informaron fuentes judiciales.
La decisión fue tomada por el magistrado Fábricio Alonso Martínez y responde a una petición de Asuntos Internos de la Policía Militar, según informó en una nota el Tribunal de Justicia Militar de São Paulo.
El agente Luan Felipe Alves Pereira, de 29 años, está acusado de "violencia arbitraria" por lanzar desde lo alto de un puente a un joven rendido en Cidade Ademar, un distrito de la zona sur de la capital paulista.
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Según imágenes que circularon en redes sociales y fueron divulgadas por los principales medios de comunicación de Brasil, el policía conduce al hombre hasta el borde del puente y, en un momento determinado, lo agarra por una de las piernas y lo lanza al vacío.
De acuerdo con esas imágenes grabadas durante la madrugada del lunes, la víctima no presentó en ningún momento resistencia al agente, quien estaba acompañado por al menos otros tres colegas.
El joven, que trabaja como entregador, sobrevivió a la caída y “está bien”, según dijo a la cadena Globo el padre de la víctima, Antônio Donizete, quien aseguró que su hijo nunca ha tenido problemas con la Policía.
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El caso generó una ola de críticas por parte de movimientos sociales, que denunciaron el aumento de los episodios de violencia policial desde que Tarcísio de Freitas asumió como gobernador de São Paulo, el 1 de enero de 2023.
De Freitas, quien fue ministro en el Gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro (2019-2022), rechazó los hechos en sus redes sociales, afirmó que “quien llega al absurdo de arrojar a una persona por el puente, evidentemente no está preparado para llevar el uniforme” y prometió sanciones “estrictas”.
En este contexto, la Secretaría de Seguridad de São Paulo informó que 13 policías implicados en el caso fueron apartados de sus cargos para esclarecer su responsabilidad.
En el caso de Alves Pereira, fue interrogado y, una vez decretado su ingreso en prisión preventiva, trasladado a la cárcel militar Romão Gomes, en São Paulo.
Este episodio se suma a otros recientes de graves abusos por parte de la Policía de São Paulo.
En noviembre, un agente fuera de servicio disparó a un hombre una decena de tiros por la espalda después de que este último intentara robar productos de limpieza en un supermercado de São Paulo, según videos publicados por los medios brasileños.
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