El presidente de Estados Unidos, Donald Trump , no asistirá a las pompas fúnebres en honor al senador John McCain, fallecido hace dos días tras luchar contra un cáncer cerebral, informó hoy el portavoz de la familia, Rick Davis.
"El presidente, por lo que sabemos, no asistirá al funeral. Es un hecho", declaró Davis a un grupo de periodistas, según el diario The Washington Post.
En su lugar, apuntó el propio Davis, serán los expresidentes Barack Obama (2009-2017) y George W. Bush (2001-2009) quienes tomen la palabra en las exequias, que se celebrarán el próximo sábado en la catedral de Washington.
Un día después, el veterano de la Guerra de Vietnam recibirá sepultura en la base naval de Annapolis, en Maryland.
A pesar de ser ambos republicanos, la animadversión existente entre Trump y McCain era por todos conocida, por lo que no extrañó que hace ya un tiempo, después de dar a conocer la gravedad de su enfermedad, el propio senador dijera que no quería que el presidente hablara en su funeral.
Desde su fallecimiento, a los 81 años de edad, la Casa Blanca no ha emitido ningún comunicado al respecto y sus banderas apenas han permanecido a media asta durante menos de 48 horas, dos hechos que han sido criticados por legisladores y medios de comunicación.
Además del funeral, está previsto que la clase política de Washington presente sus respetos a este senador que pasó más de tres décadas vinculado a la Cámara alta con la instalación de una capilla ardiente en el Capitolio, un honor reservado a una treintena de personas a lo largo de la historia del país.
lsm