Beirut.— El presidente de Líbano, Michel Aoun, rechazó ayer una investigación internacional sobre la gigantesca explosión en el puerto de Beirut y dijo que podría haber sido causada por la “negligencia” o por un “misil”, mientras continúa la búsqueda desesperada de sobrevivientes entre los escombros.
Las autoridades afirmaban hasta ahora que la explosión había sido provocada por un incendio en un enorme almacén que contenía 2 mil 700 toneladas de nitrato de amonio, una sustancia química peligrosa almacenada desde hacía seis años “sin medidas de precaución”, como lo confesó el propio primer ministro.
Aoun indicó que había sido informado de la presencia de esta mercancía el 20 de julio y que pidió que el Consejo Superior de Defensa hiciera lo necesario.
El movimiento chiita libanés Hezbolá negó “categóricamente” tener un “almacén de armas” en el puerto de la ciudad. Aoun rechazó las peticiones para abrir una investigación internacional.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo de Francia, Emmanuel Macron, acordaron coordinarse para llevar ayuda al Líbano de inmediato.
El gobierno mexicano aportará 100 mil dólares a la reacción humanitaria internacional de emergencia que se creó para apoyo a Beirut. La Cancillería informó que los recursos provendrán del Fondo de Ayuda Humanitaria de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID).
“En apoyo al llamado de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, los fondos mexicanos respaldarán el plan de respuesta de la Cruz Roja Libanesa”.
Dicha institución, añadió, brinda primeros auxilios y atención médica de urgencia; espera proveer albergue temporal a hasta 10 mil familias en las semanas próximas; da apoyo sicológico a los afectados y contribuye a la comunicación entre personas temporalmente separadas.
Con información de Ariadna García