Washington.— El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) anunció ayer una propuesta para impedir que los migrantes que busquen entrar y permanecer en Estados Unidos recurran a la asistencia pública.
“Aquellos que busquen emigrar a EU deben demostrar que son capaces de sostenerse financieramente”, señaló la secretaria del DHS, Kirstjen Nielsen en un comunicado publicado en la página del Departamento. “Esta propuesta implementará una ley aprobada en el Congreso que busca promover la autosuficiencia migratoria y proteger los recursos finitos, garantizando que los migrantes no se convertirán en una carga para los contribuyentes de EU”, añadió.
De aprobarse, los cambios implicarían ampliar la capacidad del gobierno para negar visas o la residencia permanente a los migrantes que estén en programas como Medicaid, el de Asistencia Nutricional (SNAP) o cupones para vivienda. Actualmente, la ley excluye de la posibilidad de obtener residencia permanente a personas que dependen principalmente del gobierno para subsistir.
El DHS detalló que la propuesta será publicada en las próximas semanas en el Registro Federal de EU, lo que daría inicio a un periodo de comentarios públicos de 60 días. Las autoridades deben considerar los comentarios enviados y podrían cambiar el reglamento antes de que se promulgue la versión final.
Medios de EU habían adelantado este plan del gobierno, pero señalaban que incluía como factor negativo para conceder la ciudadanía el tener beneficios médicos o créditos fiscales, elementos que no menciona el plan publicado ayer en la página del DHS.
De acuerdo con el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EU, de los alrededor de 41.5 millones de inmigrantes que radican en EU, 3.7% recibió beneficios en efectivo en 2013 y 22.7% obtuvo beneficios como Medicaid o subsidios de vivienda.