El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) identifica 19 prácticas nocivas contra las niñas y mujeres. Pero hay una que parece perdurar en el tiempo: la preferencia por los hijos varones.
“Hoy en día, la disponibilidad de tecnologías de detección del sexo (que hace posible saber si se trata de un niño), el descenso de la fecundidad y la reducción del tamaño de las familias (que hacen que escoger el sexo del feto para tener un hijo sea una opción atractiva) se combinan para impulsar la selección del sexo con sesgo de género”, dice el informe Contra mi voluntad, elaborado por el UNFPA.
Una encuesta realizada en países en donde vive 80% de la población mundial encontró que nueve de cada diez personas tienen algún prejuicio contra las mujeres. Esa es una de las causas por las cuales, en la actualidad, hay más de 140 millones de mujeres desaparecidas a consecuencia de la selección posnatal del sexo.
“Ganaste la gallina de los huevos de oro”. Eso fue lo primero que escuchó Neus Bernabeu cuando su ginecólogo le anunció el sexo de su hijo varón. La actual asesora regional de Género y Juventud de UNFPA para América Latina y el Caribe señala que este concepto está tan arraigado que se refleja en los índices de masculinidad.
En gran parte del mundo, el valor normal o “natural” del índice de masculinidad al nacer está entre 105 y 106 niños por cada 100 niñas. Todas las desviaciones respecto a este índice natural de masculinidad al nacer, dice el informe de UNFPA, evidencian cierto grado de selección del sexo con sesgo de género.