Medio centenar de antidisturbios de Policía Nacional y Guardia Civil se han enfrentado esta mañana contra más de un centenar de personas concentradas en el pabellón de Sant Julià de Ramis , donde estaba previsto que votara el presidente catalán, Carles Puigdemont.
El presidente de la Generalitat evitó acudir al colegio electoral que tenía previsto y ha podido votar en Cornellà de Terri, en Gerona.
En tanto, el gobierno defiende la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para impedir el referéndum del 1 de octubre en Cataluña.
El gobierno español ha subrayado que a nadie le gustan las imágenes en las que miembros de la Policía o la Guardia Civil han tenido que retirar por la fuerza a algunas personas de los lugares en los que se pretendía celebrar la votación . Pero han precisado que la responsabilidad es de quien ha mantenido una convocatoria ilegal y ha alentado a la gente a la movilización, destacó la Deutsche Welle.
msl