Cerca de 90 participantes de 5 países compitieron hoy por el puesto de la mejor pizza del país en el Campeonato Argentino de la Pizza y la Empanada, cuyo ganador formará parte del mundial de la pizza que se celebrará en Italia el próximo año.
Maestros pizzeros de Argentina, Brasil, Paraguay, Chile y República Dominicana, mostraron sus creaciones en la octava edición del campeonato nacional.
Los 9 miembros del jurado, integrado por maestros pizzeros y expertos culinarios nacionales e internacionales, juzgarán durante dos días cuáles son las mejores pizzas y empanadas de Argentina, entre diez categorías de uno de los platos más famosos del mundo.
A pesar de que otros años el campeonato se celebró enmarcado en la Feria de Alimentación de la capital, esta edición ha servido para que la Asociación de Propietarios de Pizzerías y Casas de Empanadas de la República Argentina (Appyce) se emancipara y organizara su propio evento con la pizza y la empanada como protagonista.
Los amantes de la cocina argentina, y en especial de la pizza y de las empanadas, pudieron degustar las especialidades de los maestros pizzeros, que en esta ocasión tenían que preparar dos versiones de una misma receta, con una pizza para el jurado y otra para compartir con el público.
Con más de mil asistentes solo en el primer día del evento, este jueves se espera duplicar esta cifra gracias al Campeonato Nacional de Empanadas y el de Acrobacia Free Style, que contará con la presencia del campeón del Mundo de este campo, el argentino Ezequiel Ortigoza.
"Es como un 'showman' pero de pizzas. Como un 'bartender' que hace malabares con las botellas pero con la masa. Me fui profesionalizando viendo videos de YouTube", consideró Ortigoza en una entrevista con Efe.
Los maestros de la escuela pizzera de Ortigoza le comentaron cuando comenzó que tenía facilidad para manipular la masa, y al sumar las clases de acrobacia que imparte el centro, el bonaerense destacó entre sus compañeros hasta que se animó a participar durante diferentes años hasta el pasado marzo en el Mundial celebrado en Las Vegas.
"Esto ya viene de años, viene de herencia", bromeó el también maestro pizzero, quien viene de una estirpe familiar que ha crecido en el interior de una pizzería y con 25 años ya es campeón mundial de Free Style.
El acróbata apuntó que todavía es muy joven, y señaló que ahora también da clases de esta especialidad, que demostrará durante la jornada del jueves en el evento, que ganó el pasado año en esta categoría.
"Me dedico a esto hace 27 años, hace 19 que tengo mi propia pizzería", explicó el pizzero, que agregó que a pesar de llevar años en la profesión, es la primera vez que participa.
Todos los concursantes debieron cocinar su especialidad frente al público y bajo la mirada atenta de inspectores que controlaron que todo estuviera en regla y que no tarde más de 30 minutos en salir del horno para ser presentada ante el jurado.
La pizza de Saravia, un homenaje a la tierra de sus padres, la provincia norteña del Chaco, contaba además con chimichurri -salsa tradicional argentina-, que conforma la nueva categoría de esta octava edición.
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