Managua.— El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega , tomó posesión para un nuevo mandato de cinco años, el cuarto de forma consecutiva, y el segundo junto a su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo, en una jornada en la que atacó al gobierno de Estados Unidos, que horas antes impuso sanciones, y habló de “borrón y cuenta nueva”.
Ortega, de 76 años, y Murillo, de 70, fueron juramentados en sus cargos por el titular del Parlamento, Gustavo Porras , quien horas antes había sido elegido nuevamente presidente del Poder Legis- lativo, cargo que ocupa desde 2017. “Vamos a seguir luchando para defender al pueblo, para que tenga salud, educación y vivienda”, dijo el excomandante sandinista después de juramentar él mismo a su gabinete en un acto realizado en la Plaza de la Revolución de Managua, entre banderas sandinistas y de Nicaragua.
“Nuestra meta es darle continuidad a la buena marcha que traíamos hasta abril de 2018. Eso, borrón y cuenta nueva, vamos para adelante, queridos hermanos nicaragüenses”. Aludió así a las protestas sociales de abril de 2018, sofocadas violentamente por policías y paramilitares.
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En un largo discurso, Ortega pidió el cese de las sanciones de Estados Unidos contra Cuba y Venezuela, y aseguró que el presidente Joe Biden “tiene más de 700 presos políticos”, en alusión a los seguidores del exmandatario Donald Trump que asaltaron la sede del Capitolio hace un año.
“Son 700 presos políticos, ¿qué esperan para ponerlos en libertad? Ahí están duros contra ellos, mientras por otro lado lanzan actividades terroristas, las organizan”, dijo Ortega.
“¿Cómo habrían reaccionado los yanquis si se les dieran actos de terrorismo como los que enfrentamos en 2018? Para ellos no eran actos de terrorismo, para ellos son ciudadanos que asesinaron a más de 40 policías y a más de un centenar, casi dos centenares de ciudadanos y que tuvieron paralizado al país durante varios meses.
“Para ellos eso no es terrorismo. ¿Por qué? Porque ellos lo organizan el terrorismo”, arremetió.
En cambio, no hizo mención de los opositores presos en el país, más de 40 de ellos entre junio y diciembre de 2021, incluyendo aspirantes presidenciales. A este grupo se suman otros 120 encarcelados por participar en las protestas de 2018, cuya represión dejó 355 muertos.
También exigió a Washington el pago de una millonaria indemnización que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) avaló en 1986, por la Guerra de Contras, en la que Estados Unidos ayudó a financiar en la década de 1980.
En cambio, sólo tuvo elogios para China, país con el que restableció relaciones tras romperlas con Taiwán. Destacó los acuerdos de cooperación que firmó su hijo Laureano con el enviado especial de China, Cao Jianming, uno de los vicepresidentes del Comité Permanente de la Asamblea Nacional Popular. “Es un pueblo [China] que va a multiplicar sus capacidades”.
A la investidura asistieron tres presidentes: el de Cuba, Miguel Díaz-Canel; el de Venezuela, Nicolás Maduro, y el de Honduras, Juan Orlando Hernández. Se requiere “coraje” para estar en Nicaragua, aseguró Ortega.
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López Obrador anuncia embajador
Por parte de México asistió Ramiro Ayala, jefe de la Cancillería en la Embajada de México en Nicaragua , según lo que anunció en la mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Un día después de que la Secretaría de Relaciones Exteriores dijera que no enviaría delegación a la investidura de Ortega, el Mandatario mexicano consideró que “sería imprudente” no enviar a algún representante al evento.
“Nosotros no podemos hacer a un lado nuestra política de autodeterminación de los pueblos y de independencia”, explicó en la conferencia matutina.
López Obrador indicó que Ayala “es el encargado de negocios, porque no tenemos embajador, pero ya vamos a pedir el beneplácito del gobierno de Nicaragua porque va a ser embajador en Nicaragua (...) Guillermo Zamora, por cierto, periodista”.
Sobre las sanciones anunciadas ayer mismo por Estados Unidos , Ortega acusó que ese país se “ensaña” con Nicaragua, a la vez que exigió el cese del bloqueo a Cuba y a Venezuela. “Si tiene una pizca de respeto al derecho internacional, que cese el bloqueo a Cuba y la hermana República Bolivariana de Venezuela”.
Temprano, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro sancionó a otros seis funcionarios del gobierno nicaragüense. El subsecretario de Terrorismo e Inteligencia Financiera, Brian E. Nelson, citado en un comunicado oficial, dijo que Nicaragua “continúa subyugando la democracia mediante elecciones falsas, silenciando a la oposición pacífica y reteniendo a cientos de personas como presos políticos”.
Entre los afectados están la ministra de Defensa, Rosa Adelina Barahona , y los generales del ejército Bayardo Pulido Ortiz y Bayardo Rodríguez Ruiz. Los tres son directivos del instituto de pensiones militares. Además, EU impondrá restricciones de visado a 116 individuos “cómplices de socavar la democracia en Nicaragua, incluyendo alcaldes, fiscales”.
La Unión Europea, a su vez, anunció sanciones contra altos funcionarios, incluyendo dos hijos de Ortega y Murillo. Varios países latinoamericanos a través de la Organización de los Estados Americanos han desconocido también la legitimidad de los comicios que llevaron a Ortega a su cuarto mandato consecutivo, hasta 2027.
Gustavo Porras, titular del Parlamento, colocó la banda presidencial a Ortega, quien estaba acompañado de su esposa, Rosario Murillo.
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