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San José. – En vísperas de reanudar mañana en México un diálogo entre oficialismo y oposición de Venezuela, los opositores ahondaron ayer sus profundas divisiones por la controversia de aceptar o rechazar participar en los comicios regionales venezolanos del 21 de noviembre próximo.
María Corina Machado, principal opositora de Venezuela, catalogó de “rendición” la medida que el martes pasado adoptó la Plataforma Unitaria, bloque adversario al régimen venezolano y una de las dos partes en México, de competir en las elecciones de gobernadores, legisladores regionales, alcaldes y concejales.
“No nos representan esos que plantean rendición y capitulación”, dijo Machado, coordinadora nacional del partido Vente Venezuela, al desconocer nuevamente las gestiones de la Plataforma como núcleo que aglutina a un sector de las fuerzas rivales al cuestionado presidente venezolano, Nicolás Maduro.
En una declaración que envió ayer a EL UNIVERSAL, Machado insistió en que la cita de noviembre será una “farsa electoral” de Maduro.
“Después de años de lucha, representados en vidas, en venezolanos que han tenido que huir dejando todo, nos vienen a decir que la solución es ampliar la jaula y claudicar”, afirmó.
“El mundo también tiene que cumplir con su responsabilidad, por su propio bien frente a un régimen criminal que se expande por la región”, advirtió.
Venezuela requiere “líderes extraordinarios” y que “aquellos que llaman a la rendición, no son líderes”, aseveró, en alusión indirecta a Juan Guaidó, líder de la Plataforma y diputado que, como presidente de la Asamblea Nacional, se proclamó en enero de 2019 como mandatario interino.
“Lo que quieren es la entrega y la comodidad de un acuerdo de cúpulas. Allá ellos”, reprochó la opositora.
“Estas son horas muy oscuras”, lamentó.
La controversia atizó la pugna de previo a la segunda fase del diálogo en México, que oficialmente se reactivará mañana y se prolongará al menos hasta el próximo lunes, con Noruega como mediador, Rusia con el oficialismo y Holanda con la Plataforma. La primera jornada fue del 13 al 15 de agosto.
En una entrevista que concedió a este periódico antes de las gestiones en México, Machado acusó a Maduro de tirano y desconoció la validez de esas pláticas al aducir que impondrían una convivencia con “el dictador”.
Guaidó, Machado y la mayoría opositora rechazaron disputar las presidenciales de 2018 (en las que se reeligió Maduro) y las legislativas de 2020 al alegar que fueron manipuladas por el régimen como fraudes y sin condiciones básicas para ser libres, justas y verificables y de tránsito a la democracia. Maduro fue desconocido por más de 50 países como presidente a partir de 2019 que definieron su reelección como ilegítima.
Las conversaciones en México debatirán un factor clave en la búsqueda de una solución pacífica y negociada de la aguda crisis política, institucional y socioeconómica de Venezuela: si el oficialismo acepta generar condiciones esenciales para unos comicios presidenciales, legislativosy de las restantes instanciasque seanhonestos y democráticos, la oposición negociará que Estados Unidos levante las sanciones económicas contra Venezuela.
La opositora Martha Hernández, coordinadora de Vente Venezuela en el occidental estado de Mérida, expresó “indignación” por el cambio que adoptó la Plataforma y aseveró que “es una enorme irresponsabilidad que anuncien una participación en esa farsa y entrega de noviembre”.
“Sacan barajitas electorales”, se quejó.
El opositor venezolano David Smolansky, asilado en Estados Unidos, comisionado de la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos (OEA) para migrantes y refugiados de Venezuela, cercano a Guaidó y autodefinido como “alcalde con orden de arresto por la dictadura”, también cuestionó a la Plataforma.
“No votar en dictadura también es un derecho. Quien no vota hoy en Venezuela ejerce un acto de desobediencia civil que desafía el control social e intimidación instalada por la dictadura. Si no hubo condiciones hace solo 8 meses para las parlamentarias, ¿por qué las hay ahora?”, tuiteó.
Choque
Guaidó, reconocido hace 31 meses como presidente legítimo por más de 50 países, chocó en Twitter con Maduro luego de que la Plataforma comunicó que peleará en las regionales.
“Me voy a sentar en mi butaca, con el televisor prendido y mis cotufas (palomitas de maíz) a ver” a Guaidó “votando el 21 de noviembre y allí aplaudiré porque logramos incluirlo en la democracia y la Constitución”, tuiteó Maduro.
“Maduro: ponte serio. Todos sabemos que hoy no hay condiciones ni garantías para una elección libre y justa. Tanto, que estás sentado como contraparte en un proceso de negociación internacional (en México) que busca esas garantías electorales, políticas y un cronograma de elecciones”, respondió Guaidó.