La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (ACNUDH) apuntó ayer a posibles ejecuciones extrajudiciales por parte las fuerzas de seguridad y a varios casos de desapariciones forzadas durante las protestas antigubernamentales en Venezuela, en un informe en el que advirtió que la democracia en ese país “apenas está viva, si todavía está viva”.
“La ACNUDH llegó a la conclusión de que las fuerzas de seguridad emplearon sus armas de servicio durante las manifestaciones, causando la muerte de 27 manifestantes”, según el informe definitivo sobre las violaciones cometidas entre el 1 de abril y el 31 de julio, periodo en el que murieron un total de 124 personas.
El presidente Nicolás Maduro “fue elegido por la gente”, reconoció el alto comisionado Zeid Ra’ad Al Husein ante la prensa en Ginebra, pero las recientes acciones del gobierno dan “la sensación de que lo que quedaba de vida democrática en Venezuela está siendo aplastado”.
Preguntado sobre el presidente francés Emmanuel Macron, que el martes tildó a Venezuela de “dictadura”, Zeid consideró que “ha habido una erosión de la vida democrática” en el país. El régimen venezolano calificó los comentarios de Macron de “ofensivos e injerencistas”.
Sobre el informe de la ONU, el gobierno de Maduro dijo que es “infundado” y “manipulado”, una “patética demostración de que esa oficina y el alto comisionado... han tomado el camino de denostar la democracia participativa que existe en Venezuela”, según señaló el embajador venezolano ante la ONU en Ginebra, Jorge Valero.
En su informe, la ONU solicita al Consejo de Derechos Humanos tomar medidas para prevenir un deterioro de la situación venezolana.
Estados Unidos, en tanto, condenó la decisión de la Asamblea Constituyente venezolana de someter a opositores a juicio político, acusados de traición a la patria por haber apoyado las sanciones norteamericanas.
La oposición en Caracas volvió a marchar para recordar a los fallecidos en las protestas contra Maduro. “Estamos en resistencia pacífica en nombre de los caídos y rechazando tanta represión y tanta injusticia contra los presos políticos. Debemos volver a las calles”, dijo a la AFP María Ojeda.
Por su parte, Maduro dijo haber hablado con el ex jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Palacio de Miraflores, en Caracas, sobre la continuidad de un diálogo con la oposición.