Washington.— El avance de la variante Delta del Covid está haciendo repensar el tema de la vacunación obligatoria. Países como Estados Unidos o Francia comienzan a aplicar restricciones a personas no vacunadas, y otros, como Alemania, las evalúan.
En Francia, más de 40 millones de franceses han recibido al menos una dosis de la vacuna contra el Covid-19; de ellos, 4 millones en los últimos 15 días, tras la decisión del presidente Emmanuel Macron de hacer obligatoria la vacunación del personal sanitario e introducir un certificado sanitario forzoso para entrar en lugares públicos que recibió el aval del Parlamento.
La medida, que compromete a todos los ciudadanos a presentar un documento de doble vacunación, un test negativo reciente o una prueba de haber tenido el virus en los seis meses previos, no es del agrado de muchos ciudadanos, pero en la práctica, ha surtido efecto, como muestran las cifras de vacunación que se aceleraron tras avanzar lentamente.
“Esta vez se quedan en casa ustedes, no nosotros”, fue la advertencia que lanzó Macron a los no vacunados.
En Alemania, que ayer recalificó a España como zona de alto riesgo de contagio, el aumento de infecciones tiene tan preocupadas a las autoridades que, a pesar de la promesa de la canciller Angela Merkel de no obligar a nadie a vacunarse, está creciendo el debate sobre si las personas vacunadas o que hayan superado la enfermedad deben tener más libertades.
La campaña de vacunación, que se ha alentado drásticamente, es otro factor que alienta este debate: el promedio diario de primeras dosis suministradas ha caído desde hace 33 días, y según estadísticas, hay 15 millones de dosis sin usar en refrigeradores.
No sólo es Europa. En Estados Unidos, el incremento de casos por Delta llevó al gobierno de la ciudad de Nueva York a volver obligatoria la vacunación de los empleados públicos, que tienen como plazo el 13 de septiembre. De lo contrario, deberán someterse a test semanales. “El objetivo es nuestra recuperación, proteger a la gente”, aseguró el alcalde Bill de Blasio.
A nivel nacional, 57% de los ciudadanos ha recibido al menos una dosis, y 49% está totalmente vacunado, pero la campaña se ralentizó por la negativa de millones a vacunarse.
Después del anuncio de Nueva York, vendría el de California, donde Delta es responsable hoy de 80% de los contagios y donde también se exigirá, desde agosto, que todos los empleados estatales muestren constancia de vacunación o test semanal.
Más tarde, el Departamento de Veteranos se convirtió en la primera agencia federal de EU en exigir que sus empleados de salud se vacunen en un plazo de ocho semanas.