Cualquier persona menor de 21 años no podrá comprar cigarrillos, puros o cualquier otro producto derivado del tabaco en Estados Unidos .
La nueva ley promulgada la semana pasada por el Congreso también es aplicable a cigarrillos electrónicos y productos para vapear que calientan un líquido con nicotina .
La cláusula en la que se aumenta la edad legal de 18 a 21 años a nivel nacional estaba incluida en la enorme ley de presupuesto aprobada por el Congreso y firmada por el presidente Donald Trump el 20 de diciembre. Aproximadamente una tercera parte de los estados ya tiene sus propias leyes que limitan la venta de tabaco a las personas de 21 años y mayores.
“Es un paso importante para proteger a la próxima generación de niños de volverse adictos a los productos derivados del tabaco”, tuiteó la semana pasada el doctor Stephen Hahn, nuevo comisionado de la Administración de Alimentos y Medicamentos ( FDA , por sus siglas en inglés).
Las leyes nuevas no suelen entrar en vigor de inmediato. La medida simplemente aumentó el límite de edad en la ley existente, por lo que fue posible implementarla de inmediato, indicó el viernes un vocero de la FDA.
La agencia ha regulado los productos derivados del tabaco desde 2009, y en ocasiones implementa inspecciones sorpresivas para hacer respetar la ley. Las tiendas pueden ser multadas o se les puede prohibir vender tabaco si la infringen en varias ocasiones.
Los activistas contra el cigarro dijeron que el aumento en la edad mínima debería hacerles aún más difícil a los jóvenes conseguir tabaco , sobre todo a los estudiantes de secundaria que tienen amigos y compañeros mayores de 18 años que se los compran.
agv