La organización venezolana Azul Ambientalistas dio a conocer que una nube de dióxido de azufre llegó a Venezuela proveniente del volcán Cumbre Vieja , en la isla La Palma, en el archipiélago de Canarias.
Según afirmó Gustavo Carrasquel, director de la organización ambientalista, “diversas agencias de monitorización de la atmósfera predicen que las emisiones de dióxido de azufre (SO2) emitidas por el volcán de Cumbre Vieja, en La Palma , llegan hasta el Mar Caribe y a Venezuela".
El v olcán Cumbre Vieja entró en erupción el 19 de septiembre. Hasta el 1 de octubre había expulsado más de 80 millones de metros cúbicos de magma.
Aunque la erupción no ha dejado heridos ni fallecidos, obligó a evacuar por lo menos a 6 mil habitantes de los 85 mil que tiene la isla.
La lava del volcán, que llegó al mar la semana anterior, también ha destruido más de mil edificios de la zona.
Carrasquel explicó que la nube de dióxido de azufre llegó al mar Caribe debido a los vientos y a las corrientes oceánicas.
“Por las condiciones geográficas de la zona, todas estas emisiones que generan los volcanes son desplazadas por los vientos que vienen del Sahara y las corrientes oceánicas del Atlántico y terminan en la región del mar Caribe”, afirmó el director de la organización en entrevista con Leandro David, periodista del diario venezolano 'Versión Final'.
Según la organización, este fin de semana, la nube se ubicaría principalmente sobre Venezuela y el norte de Colombia.
Aunque no afectará la superficie, sí puede tener consecuencias en la atmósfera, tales como la lluvia ácida o la acumulación de humo volcánico en capas.
“La mayoría del SO2 emitido se encuentra en capas muy superiores de la atmósfera, especialmente conforme se aleja de la fuente, y cabe que solo pueda apreciarse en forma de ligera neblina en el cielo”, advirtió la organización.
Azul Ambientalistas también citó a Mark Parrington, científico sénior del Servicio de Monitoreo de la Atmósfera de Copernicus, quien aclaró que las repercusiones del dióxido de azufre en el aire serán mínimas.
Sin embargo, explicaron que este dióxido sí tiene un efecto en los ojos y vías respiratorias, por lo que se recomienda evitar la exposición al aire libre en el caso de las personas vulnerables.
“Aunque la calidad del aire aún es buena, se recomienda que las personas más vulnerables como niños, embarazadas, personas mayores o con problemas respiratorios eviten exponerse a estas condiciones y de hacerlo se recomienda el uso de mascarilla al aire libre”.
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