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Pyongyang.— Miles de soldados, seguidos de la artillería y tanques desfilaron ayer en Pyongyang para conmemorar el 70 aniversario de Corea del Norte, pero sin exhibir los misiles balísticos intercontinentales que le valieron al país múltiples sanciones internacionales.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, elogió el desfile militar “sin misiles nucleares” en Pyongyang. “Es un mensaje fuerte y muy positivo de Corea del Norte”, tuiteó desde la Casa Blanca. “Gracias al presidente Kim”, agregó. “Ambos mostraremos a todos que están equivocados”, escribió, y dijo que nada es mejor que “un buen diálogo entre dos personas que se aprecian”.
El dirigente norcoreano Kim Jong-un prefirió mostrar su amistad con China, levantando la mano del enviado del presidente Xi Jinping cuando ambos saludaron a la multitud durante el desfile. El jefe de protocolo Kim Yong-nam se dirigió al inicio a la multitud: “Nuestro país se ha convertido en una potencia militar gracias a su fuerte capacidad de defensa”; sin embargo, no mencionó las armas nucleares.
El desfile consistió en una parte militar y una gran civil, que se centró en el desarrollo económico del país.
Otro punto culminante de las celebraciones del aniversario de la nación, después de una interrupción de cinco años, fue la reanudación de los “juegos de masas” en el estadio más grande de Pyongyang.
La República Popular Democrática de Corea (RPDC, nombre oficial de Corea del Norte) fue proclamada el 9 de septiembre de 1948, tres años después de que Moscú y Washington dividieran la península en el ocaso de la Segunda Guerra Mundial.