Un campo de amapolas en Eslovaquia se habría convertido en el lugar favorito para cientos de cisnes que se habrían echo adictos a los efectos narcóticos de esta planta, afectando su capacidad para poder volar.
La amapola, se ha vuelto en una de las plantas más peligrosas y de mayor demanda en la actualidad, debido a que las semillas de amapola producen opio, cuyo consumo puede provocar dependencia.
Dicha planta es utilizada para la fabricación de drogas como la heroína y morfina, así como para la elaboración de otros potentes narcóticos.
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De acuerdo con DW, los cisnes habrían llegado al campo de amapolas en febrero pasado, sin embargo, continuaron regresando al lugar donde comieron alrededor de cinco hectáreas de amapolas volviéndose adictos a esta sustancia, por lo que tuvieron que ser retirados de los campos y enviados a un centro veterinario para ser sometidos a un proceso de desintoxicación.
“Desgraciadamente, no podía volar. Si lo hubieran hecho, no tendríamos que rescatarlos”, dijo el cultivador de amapolas, Bálint Pém para DW.
Ya que los cisnes son animales protegidos en Eslovaquia, se tuvo que solicitar permisos para mover a las aves.
Se espera que después de su recuperación puedan volver a su hábitat natural.
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