Dos series populares de la BBC, "The Night Manager" (La gerente de la noche) y "Killing Eve" (Matando a Eve), están protagonizadas por mujeres que son espías. Pero, ¿cómo es en realidad trabajar para los servicios de inteligencia?
Por primera vez, cinco espías femeninas de las tres agencias de inteligencia del Reino Unido (MI5, GCHQ y MI6) se unieron para hablar en exclusiva con Nihal Arthanayake de BBC Radio 5 Live sobre su trabajo y sus vidas. Eso sí, la condición fue usar su nombres reales.
Jo, del MI5 (el servicio de seguridad interna), dijo que estaban entusiasmadas de poder hablar sobre lo que realmente hacen: "Esta es una verdadera novedad para nosotras. Sabemos que la gente realmente no sabe mucho sobre lo que hacemos".
Ameesha señaló que espera que sirva para humanizar a los espías y expresó que quiere demostrarle a todos que son "personas comunes y corrientes que realizan trabajos extraordinarios".
Analista de MI5, Ameesha está increíblemente orgullosa de lo que hace.
"Me despierto por la mañana y digo: 'Wow, realmente trabajo para MI5'. Es muy cool, me fascina lo que hago".
Kate, que ha estado en el MI6 (la agencia de inteligencia exterior) por 10 años y ahora entrena a otras personas para trabajar con agentes, dice que a menudo hay una idea errónea de que su trabajo es todo glamour y dispositivos de última tecnología, como James Bond.
"El personaje más conocido del MI6 es James Bond así que muchos creen que es así.", cuenta. "Pero no todos tenemos un Aston Martin o una lancha de carreras o cualquier otra forma original de transporte. Es más probable que nos encuentren en un autobús o en el metro que en algo así ", dice.
Para Dia, se trataba de devolver algo: inicialmente había querido ser médico, pero dice que no creía ser lo suficientemente inteligente.
"No todos pueden ser médicos, no todos pueden ser abogados, pero eso no significa que no puedes devolverle algo a la sociedad, ayudando a proteger a aquellos que amas y también a aquellos que no conoces".
Ella ha estado con el GCHQ (Sede de Comunicaciones del Gobierno) durante 10 años en una variedad de roles y dice que le costaría encontrar la misma satisfacción laboral en otros lugares.
"Cuando abres el periódico y ves algunas historias de éxito, ciertas cosas que se han logrado detener, y sabes que has sido parte de ese esfuerzo, realmente no hay nada igual".
Ameesha es todavía relativamente nueva en el mundo del espionaje: se unió al MI5 hace dos años. Estudió Derecho en la universidad y estaba trabajando en el sector privado cuando vio un anuncio en el metro.
"Era para el programa de graduados para oficiales de inteligencia. Me postulé y aquí estoy", cuenta.
"Solía ver programas de tele como 'Quantico' y 'Homeland', siempre me ha fascinado el tema. Priyanka Chopra, quien interpreta a Alex Parish en 'Quantico', es definitivamente una inspiración para mí", revela.
Jo dice que se unió a MI5 porque quería usar diversos idiomas: "No conozco a nadie, aparte de mi hijo, que diga: 'Quiero ser un espía'... todos hemos llegado a esta profesión un poco al azar y eso está bien, es lo que incentivamos", afirma.
El proceso de reclutamiento es arduo: los candidatos son interrogados por hasta ocho horas sobre su vida personal como parte de un proceso de investigación que dura de seis a nueve meses.
Las tres agencias buscan reclutar a más mujeres y personas de diferentes orígenes étnicos y sociales.
"Estamos progresando", dice Jo, que trabaja en reclutamiento, "pero sabemos que necesitamos hacer más".
"No hay un 'tipo' específico de persona que pueda venir a trabajar con nosotros", asegura.
"Así que si estás ahí pensando 'a mí no me contratarían' o 'no encajo con el tipo', lo único que te podemos decir es 'haz el intento, envía una solicitud'".
Sin embargo, advierte: "Si eres una de esas personas a las que les encanta hablar mucho de sí mismo o pones todos los detalles de tu vida en las redes sociales, probablemente no sea el lugar para ti".
Sobre el proceso de investigación, que define como "extremadamente detallado y duro", dice: "Es invasivo, pero tenemos un grupo muy calificado de oficiales de investigación que también lo hacen más fácil para nosotros".
Lilly ha trabajado en investigación e ingeniería en GCHQ durante siete años.
"Es un proceso muy extraño la primera vez que te toca... el oficial de investigación se presenta y tienes que hablar sobre tu vida personal en gran detalle. Pero realmente tratan de que te sientas cómoda. Ahora es un chequeo regular y cuando lo hago no es gran cosa. Simplemente lo superas".
Ameesha dice que para ella fue terapéutico: "Me di cuenta rápidamente de que no estaban tratando de atraparme".
Jo describe algunas de las preguntas más inusuales que le han hecho potenciales nuevos reclutas.
"Una vez uno me preguntó: '¿Tengo que usar mi propia ropa para trabajar? ¿Me pongo un disfraz?'. Mi favorito fue cuando alguien me dijo: '¿Tengo que dejar a mi novia para trabajar aquí? Porque si es necesario, lo haré'".
Jo dice que una de las preguntas más frecuentes que le hacen los posibles reclutas tiene que ver con el consumo de drogas.
"Haber fumado drogas cuando tenías 16 años en una fiesta no necesariamente te impide incorporarte a la organización, pero obviamente cuando presentas la solicitud no puedes estar tomando drogas".
Jo aclara que nunca tienes que decirle a nadie que eres espía, porque no está permitido: "No es algo que podamos contar así que es realmente extraño decirlo en voz alta".
"Es algo que tienes que aceptar", dice Kate. "Nos ocupamos de secretos, ese es nuestro oficio, es lo que hacemos. No mucha gente sabe dónde trabajo".
Dia cuenta que aprendió rápidamente a lidiar con el '¿A qué te dedicas?' de amigos y familiares: "[Fui] entrenada en esto a una edad temprana gracias a las bodas asiáticas, porque siempre te hacen preguntas inoportunas. Así que aprendes rápidamente a cambiar de tema", bromea.
Ameesha dice que sus padres (que conocen su profesión) cuentan que ella trabaja "para el gobierno o para la administración pública" y no dan más detalles. "La mayoría de la gente no pregunta más"
"Una vez uno de mis hijos me contó que en su escuela le pidieron a los alumnos que invitaran a sus padres a su clase si se dedicaban a algo interesante. "Mi hijo me dijo: 'No te preocupes mamá, tú no tienes que venir porque no haces nada interesante'. Yo pensé: 'Si solo supieras'"...
Dentro del servicio secreto, hay un creciente énfasis en el cuidado de la familia. Hay tecnología especial que permite a los padres comunicarse con la escuela o la guardería de sus hijos mientras trabajan, sin revelar su ubicación.
Y algunos espías también pueden realizar video llamadas a sus familiares cuando se encuentran en misiones peligrosas en el extranjero.
Kate cuenta: "Incluso nos dejaron hablar con nuestros padres y organizaron una videoconferencia para que nos pudieran ver a mí y a mis colegas, y pudieran ver que todo se veía normal".
Dia dice que en GCHQ hay mucha ira cuando ocurre algún atentado: "La gente canaliza su enojo, se reúne y pone todo su empeño en tratar de abordar lo que sucedió, tratando de resolver y perseguir a quienes lo han hecho".
Jo cuenta que cuando ocurre un ataque es "realmente horrible".
"Quedamos devastados cuando sucede algo así y te sientes terriblemente malhumorado... No seríamos humanos si individualmente no pensáramos 'qué otra cosa podríamos haber hecho'".
"Sabemos que no evitaremos que ocurran todos los ataques. Por mucho que lo intentemos, sabemos que la realidad es que no podemos evitarlos todos".
Kate dice que se lo toman muy en serio: "Lo poderoso de esas situaciones es que vamos a trabajar al día siguiente o antes y buscamos la manera de asegurar que nunca vuelva a suceder, y de averiguar sobre las personas que lo hicieron y atraparlos".
Trabajar en los servicios de inteligencia puede ser estresante y está absolutamente prohibido discutir los detalles de tu trabajo con las personas "de fuera". Pero hay maneras de relajarse.
Ameesha enseña clases de Bollywood a sus colegas.
Las tres agencias tienen una competencia anual de confección de tortas que es muy disputada. Dia cuenta que el MI6 también tiene una pantomima anual que es "hilarante", así como un bar en su base central de Londres.
Por su parte, Lilly revela que el personal de GCHQ celebró un "gran éxito operacional" jugando minigolf en el jardín, en el corazón de su sede de alta tecnología, la llamada "rosquilla", en Cheltenham.
Puedes escuchar la entrevista completa en inglés con las espías aquí.
Ahora puedes recibir notificaciones de BBC Mundo. Descarga la nueva versión de nuestra app y actívalas para no perderte nuestro mejor contenido.