Las autoridades presentaron el miércoles cargos penales contra un hombre guatemalteco que ha sido deportado dos veces de Estados Unidos y que es ahora acusado de manejar ebrio y matar en un accidente vial al jugador de los Colts de Indianápolis, Edwin Jackson , y a su chofer.
Manuel Orrego-Savala,
un inmigrante guatemalteco, fue acusado de causar una muerte al manejar ebrio y abandonar el lugar de un accidente en el suceso ocurrido el domingo en Indianápolis . El hombre, de 37 años de edad, dijo poco en su primera comparecencia judicial, respondiendo mediante un traductor mientras el juez explicaba el proceso y los cargos contra él.
"Está muy aturdido, por no decir mucho”, dijo su abogado, Jorge Torres. "Está muy confundido”.
Según la pesquisa, Jackson, de 26 años y su chofer de Uber Jeffrey Monroe, de 54, estaban de pie al lado del carro de Monroe cuando fueron embestidos por una camioneta que era conducida por Orrego-Savala.
Según documentos judiciales, la prueba de sangre efectuada en el hospital determinó que Orrego-Savala tenía un nivel de alcohol de 0.19%, más del doble del límite legal en Indiana.
Los dos cargos más severos conllevan cada uno un máximo de 20 años de cárcel.
Orrego-Savala fue deportado una vez en el 2007 y nuevamente en el 2009, y estaba de regreso en el país ilegalmente al momento del suceso, dicen las autoridades.
El martes fue acusado de haber entrado ilegalmente al país tras una deportación previa. Podría pasar 10 años de cárcel en base al cargo de inmigración, que según la fiscalía sería estudiado después del proceso a nivel estatal.
El presidente Donald Trump se involucró en el caso mediante Twitter, calificando de “ vergonzoso ” el choque que derivó en la muerte del deportista.
Deploró que un inmigrante ilegal haya matado al jugador de futbol americano Edwin Jackson, y aprovechó para urgir a la oposición demócrata a reforzar la seguridad fronteriza.
"Tan vergonzoso que una persona ilegal en nuestro país matara al defensa de (los Indianápolis Colts), Edwin Jackson. Esta es solo una de muchas tragedias prevenibles", escribió el mandatario en su cuenta en Twitter.
"Debemos lograr que los demócratas sean duros en la frontera, y con la inmigración ilegal, ¡RÁPIDO!", agregó.
El fiscal del condado Marion, Terry Curry, criticó los comentarios y afirmó que su despacho “procesará agresivamente” el suceso fatal, independientemente de si Orrego-Savala estaba legalmente en el país o no.
"Estamos sumamente desilusionados de ver cómo ciertos comentarios escabrosos e inapropiados han politizado esta tragedia", dijo el fiscal en un comunicado. "Gran parte de estos comentarios, incluyendo los tuits del presidente, no reconocen que tanto Edwin Jackson como Jeffrey Monroe perdieron la vida el domingo. Simplemente buscaremos hacer justicia, en nombre de las familias de las dos víctimas".
Torres dijo también que el status migratorio de Orrego-Savala no influye para nada en el caso. El abogado señaló que su apoderado ha estado viviendo y haciendo obras de construcción en el área de Indianápolis durante años.
Un portavoz de la familia Jackson dijo que toda la familia está conmocionada y no van a comentar sobre el tuit de Trump ni sobre el status migratorio del sospechoso.
"La familia está totalmente conmocionada, como uno se podrá imaginar, esto ocurrió de una manera tan inesperada", dijo el abogado Daniel Meachum.
Orrego-Savala había sido hallado culpable de manejar ebrio en el 2005 en Redwood City, California. Además ha tenido otros varios encuentros policiales en California e Indiana, según Nicole Alberico, portavoz del Servicio de Inmigración y Aduanas.
Orrego-Savala está encarcelado en Indianápolis. Compareció ante un juez quien le leyó sus derechos. Según el canal de televisión de Indianápolis WRTV, Orrego-Savala le dijo al juez que él no estaba al volante al momento de la colisión.
La policía no ha hecho mención de si hubo otra persona en el camión.
lsm