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San José. Si las elecciones presidenciales mexicanas de 2024 son ganadas por alguna de las dos candidatas favoritas, la oficialista Claudia Sheinbaum y la opositora Xóchilt Gálvez, México entrará con 50 años de diferencia al lento y paulatino proceso que vivió América para elegir a su primera presidenta.
La argentina María Estela Martínez fue la primera presidenta en América, de 1974 a 1976.
Sheinbaum, quien podría este miércoles fue proclamada como aspirante por el gobernante Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), y Gálvez, postulada el domingo anterior por la coalición opositora Frente Amplio, se disputarán la presidencia de México en los comicios generales del 2 de junio de 2024.
Una de las dos se juramentará el primero de diciembre de 2024 para cumplir con un mandato de seis años y rematará una vieja lucha de las mexicanas por superar añejos factores culturales, como los sistemas patriarcales y machistas, en un trayecto en el que Argentina marcó un hecho sin precedentes en la historia continental.
Martínez —o Isabelita— gobernó Argentina del primero de julio de 1974 —al suceder como vicepresidenta y enviudar ese día de su esposo, Juan Domingo Perón (1895-1974), cuyo mandato empezó el 12 de octubre de 1973— al 24 de marzo de 1976, cuando fue derrocada por un golpe de Estado de las fuerzas militares de su país que gobernaron hasta 1983.
Martínez acompañó a Perón como candidata vicepresidencial en los comicios de septiembre de 1973, que la pareja ganó en forma contundente.
La trinitobaguense Christine Kangaloo se transformó en la más reciente integrante del club de mandatarias, ya que el 20 de marzo de 2023 juró como presidenta de Trinidad y Tobago para ejercer por cinco años.
Kangaloo sustituyó a su compatriota Paula Mae-Weekes, primera presidenta de Trinidad y Tobago y gobernante de 2018 a 2023 de un país que es república parlamentaria y en el que el cargo de jefe de Estado lo designa el Parlamento, elegido en las urnas.
Por golpes de Estado de militares, pero sin dirigirlos, dos mujeres llegaron a la presidencia en América luego de Martínez para ejercer con regímenes de facto.
La boliviana Lidia Gueiler fue presidenta de Bolivia de noviembre de 1979 a julio de 1980, cuando cayó derrocada por los militares. La haitiana Ertha Pascal-Trouillot fue presidenta de Haití de marzo de 1990 a febrero de 1991 y entregó la presidencia a Jean—Bertrand Aristide, elegido en las urnas.
Luego de Martínez, las mujeres que por vía de los votos obtuvieron la presidencia en América fueron la nicaragüense Violeta Barrios viuda de Chamorro, de 1990 a 1997 en Nicaragua; la guyana-estadounidense Janet Rosenberg viuda de Jagan (1920—2009), de 1997 a 1999 en Guyana al enviudar del presidente Cheddi Jagan; y la panameña Mireya Moscoso viuda de Arias, de 1999 a 2004 en Panam.
También figuran la chilena Michelle Bachelet, de 2006 a 2010 y de 2014 a 2018 en Chile; la argentina Cristina Fernández viuda de Kirchner, de 2007 a 2015 en Argentina; la costarricense Laura Chinchilla, de 2010 a 2014 en Costa Rica; la brasileña Dilma Rousseff de 2011 a 2016 en Brasil; y la hondureña Xiomara Castro, de 2022 a 2026 en Honduras.
En su cargo de senadora, la boliviana Jeanine Áñez que juró como presidenta interina de Bolivia en noviembre de 2019 por la renuncia de Evo Morales por la turbulencia electoral que estalló en octubre de ese año en esa nación. Áñez entregó el poder en noviembre de 2020 al boliviano Luis Arce, pero en marzo de 2021 fue detenida por el gobierno por delitos políticos y condenada en 2022 a 10 años de cárcel.
La peruana Dina Boluarte ingresó al reducido grupo en 2022, ya que asumió en julio de 2021 como vicepresidenta de Perú junto al presidente de ese país, Pedro Castillo.
De manera sorpresiva, la peruana se convirtió en presidenta cuando, el 7 de diciembre de 2022, Castillo intentó sin éxito ejecutar un golpe de Estado y disolver e intervenir las instituciones de ese país y fue destituido por el Congreso y reemplazado por Boluarte, que deberá completar el quinquenio hasta 2026. Boluarte no es reconocida como presidenta legítima por el gobierno de México, que sigue reconocido a Castillo como gobernante.
La barbadense Sandra Mason ascendió como primera presidenta de Barbados, a partir del 30 de noviembre de 2021.
La ecuatoriana Rosalía Arteaga fungió como encargada de la presidencia por tres días en febrero de 1997 en Ecuador, como vicepresidenta y en una ruptura constitucional.
En primeras ministras, la dominiqués Mary Eugenia Charles abrió el camino al ejercer de 1980 a 1995 en Dominica, seguida por la canadiense Kim Campbell en 1993 en Canadá, la bahamesa Cynthia A. Pratt en 2005 como interina de Bahamas, la jamaiquina Portia Lucretia Simpson-Miller en Jamaica de 2006 a 2007 y de 2012 a 2016, la barbadense Mia Amor Mottley en Barbados desde 2018 y la trinitobaguense Kamla Persad-Bissessar en Trinidad y Tobago de 2010 a 2015.
El club de las 22
María Estela Martínez y Cristina Fernández en Argentina
Lidia Gueiler y Jeanine Áñez en Bolivia
Ertha Pascal-Trouillot en Haití
Violeta Barrios en Nicaragua
Rosalía Arteaga en Ecuador
Janet Rosenberg Jagan en Guyana
Mireya Moscoso en Panamá
Michelle Bachelet en Chile
Laura Chinchilla en Costa Rica
Dilma Rousseff en Brasil
Paula Mae—Weekes y Christine Kangaloo en Trinidad y Tobago
Dina Boluarte en Perú
Sandra Mason en Barbados
Primeras ministras
Mary Eugenia Charles en Dominica
Kim Campbell en Canadá
Cynthia A. Pratt en Bahamas
Portia Lucretia Simpson-Miller en Jamaica
Kamla Persad-Bissessar en Trinidad y Tobago
Mia Amor Mottley en Barbados
